Los bancos centrales de Argentina y China acordaron realizar en "caso de contingencia" un intercambio de monedas locales por un equivalente de 10.000 millones de dólares para garantizar el acceso a divisas internacionales para calmar la presión sobre el dólar ante una eventual iliquidez.

La posibilidad de este operación, denominada "swap de monedas", fue acordada por el Banco Popular de China y el Banco Central de Argentina (BCRA), señalaron fuentes de esta última entidad.

Técnicamente se trata de un "swap" (canje) de monedas en el intercambio comercial. De Esta forma la Argentina podrá pagar las importaciones chinas en yuanes y no verse obligada a pagar en dólares, que hoy escasean en el país.

"A partir de la crisis global y la volatilidad en los mercados, se han celebrado en los últimos meses una serie de iniciativas bilaterales entre diferentes bancos centrales, como un modo de garantizar el acceso a moneda internacional en caso de eventual iliquidez", indicaron las fuentes.

El Banco Popular de China, el cuarto banco central del mundo en importancia, ya tiene acuerdos de este tipo celebrados con los diez países de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (Asean).

China, que recientemente planteó la necesidad de sustituir al dólar como principal patrón de reserva internacional, es el segundo socio comercial de Argentina.

Un "swap de monedas" es una operación de canje por el cual cada parte accede a la divisa de la otra, entregando a cambio una suma equivalente en su propia moneda.

En este caso, Argentina "podrá acceder, en caso de considerarse necesario, a un máximo de 70.000 millones de yuanes entregando en contrapartida la suma equivalente en pesos, hasta unos 37.000 millones de pesos aproximadamente", preciaron las fuentes.

Los portavoces aclararon que se trata de un "acuerdo contingente" porque la transacción de intercambio se efectuará solo en caso de ser necesario.

Para las autoridades argentinas, el yuan es una de las divisas con "mayor potencial de desarrollo y está llamada a jugar un rol significativo en el rediseño actualmente en curso del sistema monetario internacional".

El economista Luis Fortino, socio de la consultora Qualitativa, dijo ayer a DyN que "siempre es útil" un acuerdo de este tipo, aunque se preguntó si se trata de un swap, como el que firmó la Reserva Federal de los EEUU con Brasil, o de un "mecanismo de intercambio compensado".

"No le veo un impacto en lo financiero y en lo comercial puede tener un impacto negativo, porque le abre las puertas a los industriales chinos", analizó Fortino.