El ministro de Infraestructura, José Strada, volverá a viajar a Kuwait en diciembre próximo con el objetivo de buscar financiamiento árabe para construir el segundo anillo vial de la provincia, una obra de 84,9 kilómetros que demandará una inversión aproximada a los 500 millones de dólares, es decir, 4.260 millones de pesos a la cotización de la divisa de ayer. ‘’Las condiciones de los créditos (en Kuwait) son buenas y es muy probable que podamos recurrir al Fondo Kuwaití y otras posibilidades que manejan allá’’, dijo ayer el ministro.

El dato se conoció al término del acto en el que la delegación kuwaití declaró que el proyecto del acueducto Tulum es ‘viable’ técnica y económicamente (ver aparte). Para esa obra el Fondo Kuwaití otorgó a San Juan, con garantía del Estado nacional, un crédito blando de 110 millones de dólares, con una tasa de interés del 3%, a 20 años y cuatro de gracia. Justamente este tipo de financiamiento blando es lo que animó a las autoridades provinciales a retornar al país árabe en busca de fondos para la obra vial.

La segunda Circunvalación es un proyecto de megaobra para unir 7 departamentos productivos sin la necesidad de atravesar el corazón del Gran San Juan, lo que permitiría descomprimir el tránsito y llegar mucho más rápido.

‘’Es una gran obra el segundo anillo vial, es una obra ordenadora de lo que va ser el San Juan del futuro, una obra estratégica muy necesaria para el ordenamiento territorial del uso del suelo en la provincia’’, dijo Strada. Agregó que se requerirán de fondos ‘importantes’ porque la obra, que va a tener las características de un anillo, ‘’requiere de muchísimos puentes para lograr que sea realmente fluido, eso la encarece bastante. Pensamos en un orden de magnitud de unos 500 millones de dólares’’.

Strada explicó que el Fondo Kuwaití financia proyectos de obra pública, ferroviarios, hídricos y obras que tengan contenido social o impacto en la gente, no así aquellos proyectos que tienen detrás un negocio que permitirá el recupero inmediato de la inversión. ‘’Financia aquellas obras que tienen una rentabilidad difusa, que van a apuntalar el desarrollo de un pueblo pero que no se puede medir el retorno en forma inmediata’’, agregó y citó como ejemplo justamente el acueducto Gran Tulum ‘’una obra necesaria para la población pero que se sabe que su inversión no podrá ser recuperada con el pago del usuario’’.

El pasado 18 de julio la Dirección Nacional de Vialidad firmó un convenio con la provincia de San Juan para financiar el proyecto definitivo de la nueva autopista, de cuatro carriles, dos de ida y dos de vuelta, a partir de un bosquejo realizado a nivel local.