Si bien el turismo celebró con burbujas el fin de semana largo, a la vitivinicultura no le cayó muy en gracia: La cosecha viene atrasada un par de semanas por maduración lenta y mano de obra escasa y el INV calculó el miércoles pasado que se han recogido poco más del 30 % de los racimos pronosticados en Mendoza y el 45 % en San Juan. El total de uva cosechada, hasta la semana pasada -acumulada al 20 de marzo- en el país rondaba los 950 millones de kilos, que ya habían producido 290 millones de litros de vino y unos 105 millones de litros de mosto. A esa altura del calendario de vendimia la temporada pasada ya habíamos recolectado casi el doble. La maduración viene remisa y es mayor en Mendoza (12.74º promedio) que en San Juan (12.51º). El presidente del INV Guillermo García reconoció el viernes que "hay entre 1 y 2 semanas de atraso y que era un problema que el fin de semana largo muchas bodegas no iban a recibir uva", subrayó.

O sea, el ritmo de trabajo en torno a los lagares, en las bodegas, tendrá que acelerar para recuperar lo demorado, pero tiene inconvenientes tanto en la evolución del grado (para mosto cuesta conseguir los 220 de azúcar), como en la predisposición de las cuadrillas de cosechadores que no acuden a las fincas, dicen que temerosos de perder alguno de los beneficios sociales.

Esto pese a que desde el gobiernos nacional y provincial se les aseguró a los cosechadores que la suspensión de los beneficios sociales es temporaria mientras dura su ocupación en las fincas y que el reintegro es casi automático al cesar la cosecha. FOEVA y los propietarios de fincas y bodegas finalmente consiguieron la homologación del acuerdo de salarios, que venía demorado también.

La poca cantidad de uva que entró a las bodegas se refleja en el grado alcohólico: "Con bajo volumen de uva no podemos hacer apreciaciones, el grado es bastante próximo en Mendoza (13,10) que en San Juan (12,97), porque han entrado primero las blancas que maduran más rápido. Pero presumimos que será un año de un grado alcohólico bajo", adelantaron en el INV.

Calidad y fechas

La calidad sin embargo, viene bastante bien: "No vemos problemas graves ni generalizados de sanidad", según los técnicos del Instituto, que anda muy atento entre las cepas. García aseguró el jueves pasado que "no se encontraron novedades en cuanto al peso de los racimos; los tachos dieron valores esperables. No hará falta hacer nuevo pronóstico". La evaluación de cómo marcha la cosecha en San Juan y Mendoza hizo concluir a los enólogos del INV y de las principales bodegas, que "el problema más grave es el grado. La cosecha está muy atrasada, al menos 15 días de la fecha normal de recolección, si a eso le sumamos que hay más uva que el año pasado, terminaremos de cosechar los primeros días de mayo".