En lo que va del 2013 el negocio del vino está evidenciando un fenómeno de ‘sustitución’ de mercado: las bodegas están abandonando la exportación de los vinos de precios más bajos, por pérdida de competitividad; y volcándose al mercado interno para suplir esa caída, según lo demuestran las cifras del INV y avalan en el sector. En el último informe del organismo difundido el viernes pasado con los datos a mayo, se advierte que la comercialización de vinos acumula en los primeros cinco meses una caída del 4,63% en volumen, con una fuerte baja en la exportación del 23,55%, y un repunte del 3,56% en el despacho al consumo interno. En la caída no se salva ni el vino a granel, ni los fraccionados, y menos el mosto (ver aparte), mientras que lo único que sube es el despacho al mercado interno. En las bodegas admiten con preocupación que ante la dificultad de exportar -por el atraso cambiario con compra de insumos a precio de dólar blue y ventas al dólar oficial- se está intentando vender el vino para el consumo puertas adentro: ‘’Eso se está reflejando principalmente en el rango de precios que antes era rentable exportar, de 18 a 20 dólares la caja de 12 botellas. Esos volúmenes ya no resisten la exportación por los costos internos y todo ese vino y know how se está volcando al mercado nacional’’, dijo Mauricio Colomé, desde el establecimiento Casa Montes, bodega elaboradora que se ocupa del mercado interno y externo. Justamente las cifras oficiales muestran que el mayor repunte de ventas al mercado interno se produjo en las botellas, que tienen un aumento del 9,25% en el acumulado de los 5 meses analizados. ‘’Siempre se trató de que lo que el mercado interno no consuma, mandarlo al exterior. Pero ahora hay tanta dificultad de sacar volúmenes al exterior, por las políticas económicas implementadas, que esa medida se revirtió’’, coincidió Angel Leotta, desde la presidencia de la Cámara Vitivinícola que reúne a las bodegas trasladistas de la provincia. ‘’Ahora se está tratando de vender adentro, y el mercado interno está tonificado por diferentes acciones, principalmente la publicidad. La Coviar, a través del Fondo Vitivinícola, ha reforzado la parte publicitaria, es más intensiva sobre todo en los grandes centros de consumo y con esto se ha logrado aumentar casi en un 4% el despacho al consumo interno, respecto a igual lapso del año pasado’’, agregó Leotta. Para Rodolfo Nale, otro exportador local, ‘nos estamos agarrando a la tabla del mercado interno que es la única que nos queda. Nosotros exportamos el 85% de la producción y en este momento estamos analizando si seguir exportando, por el problema que tenemos: percibimos 4,20 pesos por cada dólar que ingresamos al exportar, cuando nuestros costos de insumos son a precios de dólar blue, como son las botellas, tapones, papel para etiquetas y tapas’’. ‘’Es muy grave lo que está pasando, tanto que nosotros íbamos a presentarnos en una licitación de vinos en el exterior pero nos ponen un tope máximo y con eso no alcanzamos a pagar los insumos, sin contar el flete’’, agregó.
LAS CIFRAS
En lo que va del año, las exportaciones de vino se han derrumbado: en enero la venta cayó 18% frente al mismo mes del año anterior, en febrero hubo un descenso del 25,87%, que en marzo fue del 27% y en abril 16%. La última cifra de mayo marca una caída del 23,39% y un acumulado del 23,55% interanual. Ese porcentual significa que 34,9 millones de litros este año no se vendieron al mundo y se vuelcan al mercado interno. ‘’Lo importante es sacar los volúmenes, vendiendo afuera o adentro. Quizá no se gane lo que se pretende, pero lo importante es que el vino se vaya consumiendo porque sino son volúmenes que van a pesar para la próxima cosecha’’, advirtió Leotta. A su vez, los despachos al mercado interno mostraron un ascenso del 3,56% en el acumulado, con una suba del 9,11% en las ventas de vinos de color, y una caída del 11,61% de los blancos, respecto al año pasado.