El mes de abril volvió a presentarse flojo para las ventas del comercio minorista local: las cantidades vendidas por los comercios minoristas de la provincia cayeron 1,9% frente a igual mes del año pasado, según informó ayer Guillermo Cabrera, vicepresidente de la región Cuyo de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Se trata de la segunda caída de ventas consecutiva en lo que va del año, luego de que la misma entidad relevó una baja del 3% en marzo en San Juan y a nivel país, que fue el primer descenso en tres años de crecimiento continuo en la actividad.

Para Cabrera, las razones de la caída se deben a que continuó ‘impactando la problemática de la crisis financiera mundial’. ‘La gente sigue asustada y se cubre no comprando, por las dudas’, dijo el comerciante. ‘También influyeron los feriados, porque aquí en San Juan la gente no sale a comprar mucho esos días, y el turismo que hubo en este mes fue la mayoría local (ver recuadro), y no ha tenido un gasto fuerte, sino más bien, moderado’, agregó el dirigente mercantil. En el centro comercial de San Juan -la entidad que aglutina a buena parte del comercio local- recién tendrán hoy los resultados de las ventas del mes de abril correspondientes a sus asociados. No obstante, en el 2012 las cifras vienen siendo iguales a las relevadas por CAME, por lo que es posible esperar también una caída: en enero se produjo una suba interanual del 2% en las cantidades vendidas por los negocios minoristas, en febrero el aumento fue del 3%, mientras que en marzo cayeron 3%.

EN TODO EL PAÍS

De todos modos, lo que pasó en abril en el comercio sanjuanino fue peor a nivel nacional: el mes pasado la caída en los volúmenes vendidos por los comercios minoristas argentinos fue del 3,6% en la comparación interanual (ver recuadro), es decir, un 1,7 puntos porcentuales más que en San Juan, según la CAME. La entidad atribuyó a diversos factores la caída. Por un lado, la menor cantidad de días hábiles que tuvo abril (sólo 17) debido a la mayor presencia de feriados que el año pasado. Y por otro, que el cuarto mes del año encontró a muchas familias con sus tarjetas de crédito saturadas, ‘y que en vez de mantener el ritmo de gasto, decidieron destinar sobrantes a cancelar saldos y reducir así la carga financiera que pagan por sus deudas’. El informe agregó que ‘frente a una demanda más apagada, volvieron a reaparecer en el mercado los grandes descuentos y las cuotas sin interés’, pero aquellos comercios que no pudieron sumarse a la ola de promociones, debieron enfrentar una caída mayor al promedio en sus ventas. A eso se sumó un nuevo incremento en la venta ilegal, afectando al comercio que cumple con sus obligaciones fiscales’, explicó ayer en un comunicado.