En el desayuno de la Coviar, la presidenta saliente del ente, Hilda Wilhelm, realizó un duro discurso en el que se plantearon los reclamos del sector, y donde se deslizaron duras críticas a los gobiernos de Francisco Pérez y Cristina Kirchner.

El discurso comenzó con un duro racconto de la crisis que el sector sufrió a partir de los últimos años. "En los años 2014 y 2015 se tomaron medidas equivocadas desde el sector público. Entre otras cosas hubo manejo político de las pronósticos de cosechas, y generaron la mayor crisis de la vitivinicultura en los últimos 25 años". La baja del consumo también fue parte del discurso: "En el último año perdimos 9 puntos porcentuales de consumo en el mercado interno". Por eso, explicó Wilhelm se realizó un estudio en el que se estudió el perfil del consumidor argentino, para crear nuevas estrategias.

 Hilda Wilhelm

Los puntos más duros fueron para la carga impositiva del sector, que en los diferentes puntos de la cadena acumula cerca de 30 por ciento. Para combatir esta situación "debemos trabajar en mantener y consolidar la diversidad de productores y actores. Compensar los altos costos logísticos: el 30% del flete son impuestos. Lograr acuerdos inter similares a los que poseen nuestros competidores directos. Mejorar estructura para el despacho, y sobre todo disminuir la presión fiscal".

Hubo un párrafo aparte para el proyecto que intenta prohibir la publicidad a las bebidas alcohólicas. "Autoridades de la Ciudad de Buenos Aires pretenden con una ley inconstitucional prohibir la publicidad de nuestro vino, la bebida nacional. Enfáticamente decimos ‘no nos sobra ningún consumidor'. El vino es cultura, orgullo, trabajo, despierta elogios internacionales, es embajador en el mundo".

Para finalizar, la titular de la Coviar cerró con una contundente frase que buscó poner en foco la problemática de los actores que muchas veces quedan fuera de la cadena de valor: "No nos sobra ningún productor".

Aquí, el discurso completo: