El Gobierno nacional decidió hace 10 días terminar con el cepo cambiario y establecer una banda donde se moverá el tipo de cambio. Si bien inicialmente se trató de una devaluación, porque el dólar se ubicó cerca de los $1.300, pero luego se acomodó en valores más bajo hasta ubicarse, por ejemplo ayer, en $1.110.
En el medio, algunas compañías decidieron enviar listas a los supermercados y mayoristas con aumentos significativos, cosa que generó malestar y hasta hubo algunos que las rechazaron e, incluso, hasta el propio presidente salió a cuestionar y pedir no comprar al que aumentó los precios
En este marco, en San Juan esa tensión también tuvo su correlato
“La semana pasada nos llegó la notificación de proveedores que iban a tocar la lista para arriba, después esto se frenó y ahora está al mismo precio que antes. Nosotros somos un espejo del cliente y si vemos que no tiene aceptación en la gente, no podemos comprar”, de acuerdo a lo que expresó el gerente del mayorista Café América, Jorge Casas, en una entrevista en Radio Light.
Es más, el empresario agregó que “no hay margen a aumentos ante la caída del consumo”, en clara alusión a que todavía no se recupera uno de los nicgos de la economía más sensibles.
Casas explicó que “la gente compra lo del día a día” y que “hasta las primeras marcas han tenido que hacer acciones muy fuertes para que la gente los vuelva a elegir”.