Durante más de un año, las gestiones primero privadas y finalmente públicas avanzaron hasta que ayer se cumplió el objetivo, que tiene peso histórico: Nación quitó las retenciones a las cales. Se trata de un gravamen que pagaban quienes exportaban y por lo tanto afectó especialmente a San Juan, que es el principal vendedor al exterior de este producto. Tras esto, esperan que esto le dé más impulso al sector porque los volverá más competitivos, en especial a la hora de llegar al mercado chileno. Según dijeron, a mayores ganancias podrán reinvertir más en la capacidad local, algo que ya venían haciendo a pesar de los vaivenes del mercado.

La decisión de Nación se conoció a primera hora del jueves, cuando publicaron el decreto que eliminaba la regulación anterior. Las retenciones a la exportación de minerales sumaban un costo de un 5% por dólar FOB que vendían al exterior. Esto afectaba a un sector que en San Juan tiene, según estadísticas de 2024, más de 1.000 trabajadores y una capacidad productiva que superaba las 2.200.000 toneladas anuales de cales, además de representar cerca del 25% de las exportaciones locales.

Debido al alto impacto que tenía en la provincia, referentes locales llevaban cerca de un año y medio gestionando en Nación este cambio. Juan Pablo Perea, ministro de Minería, aseguró que empezaron “luego de pedidos de privados y por iniciativa del gobernador Marcelo Orrego a gestionar pidiendo esto”. El funcionario contó que el ministro de Producción local, Gustavo Fernández se puso en contacto con Pablo Lavigne, secretario nacional de Coordinación Productiva, y él con Luis Lucero, secretario de Minería de la Nación. Antes los empresarios habían hecho un pedido a través de CAEM para que redujeran este costo. El argumento principal era que, si bien no aportaba una gran cantidad de fondos a las arcas públicas, tenía un fuerte impacto en la producción local.

Raúl Cabanay, integrante de la Cámara Minera y referente de caleros, celebró la baja de retenciones y explicó que será clave para el sector. “La cal es un producto de muy bajo valor y esto nos ayuda a tener más competitividad”, explicó el empresario. Desde hace tiempo los productores están intentando llegar al norte de Chile, donde está la mayor parte de la producción de cobre y litio del país, dos industrias que requieren mucha cal. Pero, según explicó, “en esa zona tenemos una fuerte competencia porque compran de México, de Asia y hasta de Italia y tener un 5% más de costo más la logística nos complicaba”. Además del empresario calero, la Cámara Minera de San Juan también transmitió su apoyo a la medida a través de un comunicado.

Perea agregó que fue atendiendo a esas condiciones de baja rentabilidad que decidieron apoyar esta propuesta y también porque “la provincia está comprometida con toda la minería, aunque hoy San Juan sea referente en cobre y otros metales”. Esto, además, esperan que se traduzca en mayor crecimiento del sector, que ya viene atravesando un aumento de escala en los últimos años. Cabanay dijo que la expectativa de tener mayores mercados vinculados a la minería los ha incentivado a invertir, incluso cuando el escenario actual no es el mejor. El sector se enfrenta a una baja de ventas al sector de la construcción tras el freno de la obra pública, pero han podido mantenerse en las ventas al exterior y piensan seguir creciendo.

A futuro, el empresario dijo que todavía quedan factores en los que necesitan trabajar, en especial el costo logístico. Recordó que una solución podría ser la ruta 153, que conecta Los Berros, principal centro productor, con Barreal y al paso mendocino Los Libertadores. Perea, por su parte, aseguró que van a seguir gestionando a Nación las necesidades del sector, aunque reconoció que el freno a la obra pública dificulta el avance en este proyecto logístico.