Valentina Ensinck es una sanjuanina que migró a los 20 años de los negocios tradicionales al marketing digital. Hoy se dedica a formar nuevos emprendedores en este sector, con más de 1.300 alumnos de varios países. La menor cantidad de clientes para sus formaciones son de San Juan y esto, dijo, hace que haya “muchas posibilidades de crecer para los profesionales y negocios físicos de San Juan”. Según su experiencia, son quienes tienen ya trayectoria los que pueden encontrar mejores oportunidades y contó que en un futuro, por los avances de sectores como el minero, habrá más salidas laborales o contratos para quienes tengan experiencia en este sector.

Para la sanjuanina, hoy existe un crecimiento en las posibilidades de encontrar trabajo gracias a que “a las empresas les conviene más contratar una consultora o un profesional freelance cuando necesitan servicios concretos”. Es ahí donde quienes tienen conocimientos y también están habituados al universo digital pueden ofrecer sus servicios. “Trabajar en el mundo digital es poder cobrar en dólares, manejar tus tiempos y ponerle un valor a la hora de trabajo”, dijo. Además, contó que en San Juan hay poca oferta “porque hoy les cuesta más animarse”. En lugar de ver una debilidad en esto, para ella significa que hay “más alternativas para salir a buscar clientes con los conocimientos locales”.

El de ella es un ejemplo. Empezó a estudiar ingeniería industrial, pero encontró en el marketing un rubro en el que prefería trabajar. Hace 8 años decidió dejar la carrera, especializarse y vender sus servicios, ya que tenía un trabajo con una empresa de Buenos Aires. Con el tiempo migró de la relación de dependencia a tener sus propios clientes y cuando tuvo demasiado trabajo, decidió que iba a formar a sus pares para poder delegar tareas. Así surgió una academia en la que tiene más de 1.300 recibidos, a los que les enseña a aprovechar el universo online. Además del trabajo habitual, en 2024 convocó en un evento a 400 personas y este año, el 5 de julio, harán una segunda edición, donde esperan a 1.000 asistentes “de Colombia, Uruguay y de todo el país”. Decidió hacerlo nuevamente en la provincia, aunque el grueso de sus clientes no son locales, porque espera incentivar a emprendedores sanjuaninos.

En su tiempo de experiencia, los principales frenos tienen que ver con la ansiedad y la falta de confianza. “Los negocios digitales requieren que uno aprenda, se capacite y pueda gestionar su tiempo, porque nadie va a hacer por vos lo que hace falta”, agregó. La edad no es una dificultad, sino un valor, dijo. “Quienes tienen 40 o 50 años tal vez tienen menos facilidad con la tecnología, pero tienen experiencia previa, que ayuda mucho a conseguir oportunidades”, explicó. En cuanto al miedo a los cursos u ofertas que pueden ser una estafa, dijo que es posible “ver cuáles son las expectativas que genera quien los vende, si es una capacitación con alumnos y referencias o hablan de en un mes tener relojes y departamentos”.