La selección argentina sub 23, una de las esperanzas de medalla de la delegación en los Juegos Olímpicos a partir del potencial de su plantel, que cuenta con cuatro campeones del mundo, necesita de un empate hoy ante Ucrania (desde las 12) en el Parc Olympique Lyonnais para avanzar a cuartos de final de la competencia. El combinado albiceleste comenzó con una caída 2-1 contra Marruecos en el escandaloso encuentro que estuvo dos horas suspendido por invasión de campo y lluvia de proyectiles, triunfó 3-1 frente a Irak y ahora se jugará se futuro en un grupo cerrado: los cuatro equipos tienen tres puntos.
Para lograr el objetivo, Javier Mascherano realizaría tres cambios respecto de la victoria ante los asiáticos. Y también apostaría a un esquema hiper ofensivo, en pos de hacer valer la jerarquía. Una modificación sería el ingreso de Gonzalo Luján, defensor de San Lorenzo, como lateral derecho, para brindarle más equilibrio al equipo y soltar las palomas con respaldo. El que saldría es Joaquín García.
El Jefecito prescindiría de un mediocampista (Santiago Hezze) para hacerle lugar a un punta (Giuliano Simeone, quien siempre energizó al combinado con sus ingresos). Y le haría lugar a su talismán, Luciano Gondou (autor de una conquista ante Irak y de varios tantos clave en el Preolímpico) por Lucas Beltrán, quien salió con una molestia en la espalda en el último compromiso.
A la misma hora que Argentina-Ucrania, pero en el Stade de Nice, Marruecos-Irak afrontarán el otro cotejo fundamental. Avanzarán a cuartos de final los primeros dos equipos de cada una de los grupos. En el caso del campeón de América, los cruces serán con el Grupo A que protagonizan Francia, Nueva Zelanda, Guinea y Estados Unidos. Los dos líderes de cada zona cruzarán sus caminos con el segundo de la otra.
Empatando Argentina asegura clasificación, pero ganando – y si es por un par de goles mejor- se asegura el primer lugar, posición que le permitiría cruzarse en cuartos con el segundo del Grupo A, que sería Estados Unidos, evitando a Francia -que lidera esa zona- en un partido por los cuartos de final.
De seguir ambos equipos en la competencia los dirigidos por Mascherano se medirían con los dirigidos por Thierry Henry en una eventual final por el oro olímpico, en un ámbito marcadamente anti argentino del público galo.