Tras arduas y larguísimas negociaciones, finalmente River le compró el pase de Kevin Castaño a Krasnodar. La transacción, que se decía estaba cerrada en nueve millones de dólares, finalmente terminó siendo mucho más cara y se convirtió en la segunda más cara en la historia del club de Núñez. Después de varias idas y vueltas, el Millonario había logrado que el equipo ruso aceptara desprenderse del porcentaje de la ficha del jugador que poseía (70%) por menos de 10 millones de dólares. Luego de presentar avales, concordar en un plan de pago y cruzar la documentación pertinente, apareció Cruz Azul y exigió que se le comprara a ellos el 30% restante.
Aquí fue cuando fueron los números se fueron a las nubes. Ya con todo listo para sumar al mediocampista, la demanda del club mexicano podía llegar a hacer caer el pase. River se vio sin tiempo y urgido por cerrar el traspaso y terminó por aceptar esto; finalmente pagará 13,8 millones de dólares brutos por el futbolista de 24 años. Cabe destacar que Castaño aterrizó en la Argentina este martes por la mañana y se movió a la tarde hasta la clínica Rossi, del barrio de Belgrano, para empezar a realizarse la revisión médica, que constará de dos partes. Se estima que, luego que complete la segunda el miércoles, firmará su contrato y será presentado en las redes sociales. Con esa cifra final, solo queda por detrás de la compra de Lucas Pratto a comienzos de 2018, cuando, entre los 11 millones fijos y otros tres variables, abonó 14 millones de dólares por un delantero que terminó anotando dos goles decisivos en la final de la Copa Libertadores ante Boca.
Se trata de una apuesta muy arriesgada, pero que en Núñez creen que saldrá bien. Pedido expresamente por Marcelo Gallardo.
> River denunció a Foster Gillette
La novela de Rodrigo Villagra y Foster Gillett, que mantuvo en vilo a River durante varias semanas, no le saldrá gratis al empresario estadounidense. El club de Núñez lo denunció penalmente, junto con Guillermo Tofoni -el socio que lo acercó al fútbol argentino- y Juan Manuel Cobián -su asesor en las negociaciones-, por causar “graves perjuicios al patrimonio de la institución”.