Marc Márquez ganó el Gran Premio de Tailandia de MotoGP en Buriram, corrido en la madrugada argentina de ayer. El ocho veces campeón del mundo tuvo que gestionar la carrera con dificultades en los neumáticos para imponerse a su hermano Alex Márquez (Ducati), del equipo Gresini, y Francesco Bagnaia (Ducati), en lo que fue un Inmejorable estreno con la escudería italiana.
A pesar de un inconveniente con la presión de los neumáticos delantera en su Ducati que puso en riesgo la victoria, Marc perdió la punta a manos de su hermano menor, pero la pudo recuperar en los últimos giros, para cerrar el fin de semana perfecto.
Marc Márquez sólo cedió la vanguardia ante su hermano Álex (Ducati de Gresini Racing) durante 16 de las 26 vueltas del GP tailandés cuando notó que la temperatura del caucho no era la esperada y con ello debió girar segundo para intentar conseguir una mejor prestación; cuando advirtió que la presión mínima estaba en 1,8 bares y había recorrido el 60% de carrera, volvió a atacar y tomar el liderazgo restando tres giros para la bandera de cuadros y recibirla por 63° ocasión antes que sus rivales.
La próxima fecha del MotoGP será el GP de la Argentina en el autódromo de Termas de Río Hondo.