Noemí Lázaro fue una de las primeras en llegar al Santuario de Fátima, en Rawson, junto a Lizi, la perra que fue rescatada de la calle y que adoptó. Prefirió esperar para no perder esa gran oportunidad: que su mascota recibiera la bendición para continuar con éxito el tratamiento contra el cáncer. Como Lizi, fueron más de 50 los animales que ayer coparon el patio de la iglesia para ser bendecidos con agua bendita. Este es el segundo año consecutivo que en este templo se bendice a las mascotas por iniciativa del padre Jonatan Felix, en el Marco del Día del Animal.
Petra se transformó sin querer en una de las atracciones de esta jornada fuera de lo común en la Parroquia de Fátima. La gente que también llevó a su mascota al templo no podía creer como esta caniche de 14 años permanecía tranquila y sentada en el changuito que le compró su dueña para sacarla a pasear. ‘Desde que nació está conmigo y es mi regalona. Me acompaña a todas partes, a los viajes y hasta a misa. El año pasado no pude traerla para que recibiera su bendición, gracias a Dios esta vez sí pudimos venir. Es algo hermoso que también vamos a compartir’, dijo María Reinoso, dueña de Petra.
De diferentes razas y tamaños, los perros fueron copando el patio. Algunos restaron por su vestimenta, mientras que Kiara y Beili lo hicieron por su gran porte. Estas rottweiler y golden, respectivamente, fueron las más grande de todas las mascotas presentes. Sus dueñas tuvieron que esforzarse para mantenerlas alejadas y bien sujetas con la correa. Igual, ambas perras se tomaron una foto junto al padre Jonatan que posó con cada mascotas que asistió a evento.
Al mediodía en punto comenzó la ceremonia previa a la bendición. En ese momento, la antesala del templo se llenó de perros, gatos y hasta tortugas.
En primer lugar, el padre Jonatan Felix resaltó algunos pasajes bíblicos en los que los animales tuvieron una participación decisiva o en los que Dios destacó su valor, citando como ejemplo que fueron salvados del diluvio en el arca de Noé.
Tras rezar un padre nuestro y bendecir a las mascotas con la señal de la cruz, el sacerdote recorrió todo el patio del frente de la Parroquia de Fátima para que el agua bendita llegara a todos los animales presentes.
Lo particular de este año fue que el sacerdote también los bendijo a la distancia. Algunos fieles le llevaron fotos o accesorios de sus ‘regalones’ para que los bendijera.
> Por el maltrato
El padre Jonatan Felix, del Santuario de Fátima, dijo que este año la bendición de mascotas también se realizó debido a los reiterados casos de maltrato animal, y de su uso en rituales, que sucedieron en la provincia y que se dieron a conocer a través de las redes sociales.

