La jueza, Carolina Parra, condenó el último viernes a un ayudante de electricista, de 25 años, a 6 años de prisión porque, al cabo del juicio, consideró probado que violó a su amiga cuando estaba ebria y no pudo ofrecer resistencia porque estaba dormida, tal como sostuvo la fiscal, Adriana Ginestar. El imputado llegó libre al juicio y así siguió, porque Fiscalía no pidió su prisión preventiva. Y ahora sus defensores, Nicolás Gómez Camozzi y José Luis Guidet Montilla, buscarán revertir el fallo ante un juez del Tribunal de Impugnación.

El controvertido episodio ocurrió la noche del 15 de setiembre del año pasado, en la casa donde vive el ahora condenado, Santiago Daniel Cáceres Oviedo.

Ese día ella llamó al sospechoso (con el que mantenía una amistad con intermitencias desde unos 5 años atrás) y éste la invitó a su casa, donde se celebraba una fiesta. Allí bebieron cervezas hasta que en un momento hubo una relación sexual. No consentida y con acceso carnal, según Fiscalía. Consentida y sin penetración, según la Defensa.

Los defensores sostienen que a pesar de estar ebria, la joven nunca perdió la conciencia porque pudo conducir una moto de regreso a la casa de sus tíos, donde vivía con su hija. Que las lesiones que presentaba pudieron ser de un encuentro sexual que tuvo con otro joven dos días antes. Que denunció por temor a que su cliente divulgara un video de ella desnuda durante el encuentro sexual que mantuvieron. O por temor a las represalias de sus parientes, por llegar fuera de horario.