Tiene 59 años y es dueña no solo de un talento, sino también de una feminidad y una seguridad que se convirtieron en sello propio… y en inspiración para seguidores y para gente del ambiente. Sin embargo, no siempre fue así para Shania Twain, o mejor dicho, para Eilleen Regina Edward, su nombre real. La famosa cantante canadiense confesó a la revista US Weekly que cuando era adolescente la pasó muy mal: odiaba su cuerpo, sus curvas e incluso el hecho de haber nacido mujer. ¿Por qué? Estaba cansada de atravesar situaciones incómodas con los hombres, hasta abusivas a veces, por que no faltó quien le pusiera una mano encima o le dijera algo inapropiado. Tanto llegó a molestarla esta situación que lo único que cuando su mamá le preguntaba qué quería ser de grande, ella decía “Culturista’, y que era cierto, pero por una razón: quería ser “grande y fuerte’ para que nadie se metiera con ella. “Nadie iba a tocarme el brazo, el trasero ni nada a menos que yo estuviera de acuerdo”, relató. Y no solo eso, confesó que se sentía tan incómoda e insegura con sus curvas, que “odiaba ser mujer, odiaba ser una chica’ y acotó que “me escondí durante toda mi adolescencia. Odiaba tener tetas, odiaba tener caderas’.
Con el tiempo Shania logró sobreponerse, fortalecerse; y comenzó a amarse. Cuando escribí Man, I feel like a woman!, fue una celebración absoluta de eso. Y me sentí poderosa. Me dije +No pueden agarrarme. Estoy a salvo+’, relató la cantante que, sin embargo, no deja de contemplar y de abrazar a aquella jovencita que no pudo disfrutar de esa etapa de la vida.



Shania Twain es una defensora de las mujeres, a quienes alienta a no tolerar los abusos y también a quererse como son, reales, sin agobiarse por los modelos que imponen pantallas, revistas y pasarelas.

