El ciclista danés Matías Skjelmose (Lidi-Trek) se impuso ayer en la clásica Amstel Gold Race, venciendo en un furioso sprint de tres a los dos máximos favoritos, el esloveno Tadej Pogacar (UAE Emirates) y el belga Remco Evenepoel (Soudal-Quick Step). El trío sacó 34 segundos al resto.

Después de 256 kilómetros de competencia solo tres hombres pelearon por la victoria. Pogacar había abierto un hueco a 50 kilómetros del final y parecía que coronaría otra victoria en solitario. Skjelmose que había quedado a “media agua” fue alcanzado por Evenepoel y alcanzaron al campeón mundial faltando cinco kilómetros, y definieron entre los tres.