Fueron 2 minutos y 21 segundos de un abrumador dominio. Un registro inalcanzable para el resto que terminó dejando sin nada al lote de los otros seis aspirantes a la corona. Así, con de punta a punta, el tordillo Solicitadísimo se adueñó de la 72º edición del Clásico Sarmiento que fue la estrella de la tarde en el Jockey Club de Rivadavia. El ganador, propiedad del stud El Resongón, no dejó margen alguno para que nadie le discutiera su dominio y claro, para delirio de su cuidador Luis Perona, Endo Verde también del mismo stud, fue el escolta del gran campeón, siendo que en los papeles y en la previa, era más candidato que Solicitadísimo.
En la largada, fue el tordillo Solicitadísimo el que partió primero, lo siguió Señor Importante, del stud La Nona, de Horacio Muñoz pero le aguantó el paso hasta el primer codo de la pista del Jockey. Ahí, Solicitadísimo apretó, sacó ventajas y desde atrás lo emparejó Endo Verde que pintaba para candidato. Los dos se cortaron casi solos y en el tramo decisivo de los últimos doscientos metros, el campeón le terminó sacando dos cuerpos a su compañero de sutd para festejar la conquista del Clásico Sarmiento en una tarde marcada por las emociones. El tercer escalón del podio fue para Señor Importante, remarcando que Asiatic King que tenía boletos ganadores no tuvo una buena carrera.
La carrera estelar no defraudó a nadie y terminó siendo la frutilla del postre de un 11 de Septiembre espectacular en el Jockey. Con presencia masiva de los amantes del turf y de muchas familias, el predio de la calle República del Líbano volvió a mostrar una de sus mejores postales. Es que el Clásico Sarmiento tiene la tremenda capacidad de revitalizar un deporte que necesita continuidad. Los stands artesanales y gastronómicos tuvieron muy buena demanda terminando de completar un día especial para todos los que aman los caballos y sienten la adrenalina de las carreras.
>Un día de carreras
La actividad del Jockey Club San Juan comenzó temprano, apenas pasadas las 11 se largó la primera de las 15 carreras que componían el programa.
El clásico Sarmiento fue apasionante pero sobraron más emociones.