La imagen del paseo es desoladora. A tal punto que hasta una propia empleada del lugar decidió difundir a través de las redes sociales varias fotos que muestran el avanzado deterioro del lugar, para generar conciencia. Se trata del Camping del Dique Lateral, en el departamento Zonda, donde todos los años se realizan las Colonias de Verano que organiza el Gobierno, uno de los 90 centros de actividades deportivas y recreativas. Desde el municipio dijeron que esta situación se debe al vandalismo constante, aunque la denunciante sostuvo que también es por la falta de mantenimiento. Además carece de un cuidador.

La entrada al camping ya es una antesala del mal estado del camping. Allí está la garita que debe ocupar quien cobra el ingreso al lugar. No tiene vidrios y la ventana está cubierta con un nylon. A los poco pasos se puede comenzar a visualizar el desastre. Lo más llamativo son los bancos de hormigón y las mesas del mismo material, destruidos. Algunos tienen la estructura quebrada, mientras que a otros los arrancaron de las bases y dejaron tirados sobre el suelo. Y a otros no sólo que les arrancaron algunas partes, sino que además se las robaron.La falta de higiene en notable. ‘Es desolador ver el estado en que está este camping donde casi todo está roto o no funciona. Y no sólo es por vandalismo, se ve que hace bastante que no le hacen trabajos de mantenimiento’, dijo Patricia Giovenco, empleada del Municipio de Zonda que fue derivada a este camping para trabajar en la boletería, y quien difundió las fotos del mal estado del lugar.

Menos de la mitad de los parrilleros se salvaron del vandalismo y son los que el municipio pintó para refaccionarlos. Pero, la otra mitad está destruida hasta con los muros derrumbados y sin parrilla.

Los sanitarios tampoco se salvaron ni del vandalismo ni de la falta de mantenimiento. Sólo hay 6 que funcionan a media, ya que no tienen agua, tres son de hombre y 3 de mujeres. Los otros 6 que construyó la gestión anterior aún siguen sin ser habilitados. ‘Yo no sé como hacen durante las Colonias de Verano porque son 360 las personas que participan y sólo hay 6 baños funcionando. Y ni siquiera tienen agua caliente como dicen los carteles. Es una vergüenza’, dijo Giovenco.

Tarea inútil. Mesas desmanteladas y sin bancos, los vándalos no descansan.La falta de seguridad se evidencia a lo largo del camping.

En los troncos de varios árboles, hay carteles que indican otra deficiencia en el lugar. Dicen ‘Agua no apta para el consumo humano’. Es por eso que quien visita el lugar debe llevar agua potable para consumo, tal como hacen los empleados del camping. ‘Acá no hay ni un dispenser así que tenemos que traer agua desde casa. Es un servicio básico, más en un lugar donde la gente viene en familia, en grupos de jóvenes y amigos a pasar el día’, dijo la empleada.

Este camping se ubica detrás de la Villa Tacú, en una zona alejada, con poca iluminación y con pocos vecinos en la zona. Estos son factores que influyen para el vandalismo constante en el lugar, según dijo Ariel Sosa, a cargo de Obras y Servicios del municipio de Zonda. ‘No damos a basto con el vandalismo. Los delincuentes aprovechan que el camping está un poco escondido y con poca gente cercana para entrar y destrozar todo. Todos los años lo refaccionamos para que estén a punto para las Colonias de Verano y para la temporada de vacaciones, así que dentro de poco comenzaremos con los trabajos, tanto en este camping como en el del Cerro Blanco’, dijo el funcionario.

Asaderos. Algunos abandonados e incompletos, con falta de mantenimiento. También son víctimas del maltrato y la carencia de cuidadores en el camping.

Sosa admitió que no hay agua potable para el consumo en el camping, por lo que la gente debe llevarla desde su casa. Aunque dijo que el agua disponible en el camping es apta para el lavado de frutas o verduras y para la higiene personal. Agregó que ‘Osse, en forma periódica, realiza el análisis de esta agua para corroborar su estado libre de contaminantes.