Los tramos más salientes del violento ataque a mano armada quedaron registrados en las propias cámaras que la víctima tiene en su casa. Allí se pudo ver que tres sujetos provenientes del límite con el barrio, ingresan por el frente luego de sortear dos vehículos del garaje y meterse al interior por una gran ventana lateral. Con sus rostros cubiertos y los tres con armas de fuego, corrieron la cortina, encendieron una linterna y avanzaron unos pasos, hasta que la luz del aparato sufrió bruscos movimientos y, de repente, se escuchó un estruendo. Lo que siguió fue desesperante dentro de esa vivienda del barrio San Juan de los Olivos, en Rivadavia, porque el tremendo ruido había sido un disparo que se coló por el cuello del dueño de casa, un comerciante, y le dañó un pulmón, dejándolo en muy grave estado, dijeron fuentes judiciales.
Todo pasó alrededor de las 3 de la madrugada de ayer dentro de una casa situada al final de un bulevar, cercano al cierre perimetral de ese barrio privado ubicado a un costado de Rastreador Calívar, entre República del Líbano y Doctor Ortega ( conocida como Superiora).
Según los voceros, los delincuentes llegaron y se fueron por donde ingresaron, sin robar nada en la casa de ese hombre al que balearon, identificado como Emanuel Rodríguez, de 43 años, quien estaba con su familia cuando se produjo el violento ataque.
Y si bien por ahora la hipótesis más firme del caso es que pudo tratarse de un intento de asalto a mano armada, los investigadores no descartan otras teorías.
Por eso, investigaban la actividad comercial de la víctima y también eventuales problemas con alguna otra persona. ‘No parece un ataque al voleo, el hecho de que cubrieran sus rostros y entraran a pesar de haber dos vehículos en la casa, indica que pudieron saber que había cámaras y que en la vivienda había personas’, especuló un investigador.
El caso es investigado por policías y peritos de Criminalística al mando de los fiscales coordinadores de la UFI de Delitos Contra la Propiedad, Claudia Salica y Cristian Catalano.
Además de las cámaras de la víctima, ayer rastrillaban también otras cámaras que hay en la zona en busca de pistas. La investigación del violento caso se manejó con mucho hermetismo.

