Empezó la otra Copa Libertadores. Ahora, en los mano a mano todo vale, todo cuenta. Y el primero de los argentinos que entró en la zona de los Octavos de Final fue Vélez Sarsfield que en el partido de ida, en Brasil, hizo negocio redondo al empatar sin goles con el Fortaleza, que hace rato no puede ganar como local y lo reflejó ante los dirigidos por el Mellizo Barros Schelotto. Con orden, con la concentración que se necesita en este tipo de partidos que son a 180 minutos, Vélez edificó un resultado que el próximo martes tendrá que potenciar cuando jueguen la revancha en Liniers.
Le alcanzó con la seguridad de Tomás Marchiori en los pasajes más complicados y pudo haberlo resuelto en algunos momentos favorables cuando Brian Romero y Maher Carrizo hicieron pesar su peligrosidad. Fortaleza, como era de esperar, fue el que más propuso pero sus propias limitaciones lo fueron haciendo inofensivo. Vélez inició mejor en la primera etapa, con bastante juego en campo del conjunto brasileño pero muy discreto a la hora de romper el fondo y generar peligro.
No obstante, el equipo argentino se fue quedando en los minutos siguientes y el mediocampo de Fortaleza ganó terreno y ganó la pelota para meterse más en zona de la visita y así desordenar a Vélez, pero los dirigidos por Guillermo Barros Schelotto estuvieron bien en defensa y frenaron cada intento.
Para el complemento, Fortaleza fue amplio dominador pero una tonta expulsión de Matheus Rossetto, quien había ingresado durante el segundo tiempo, debido a las constantes infracciones y dejó al elenco brasilero con diez futbolistas.
Fortaleza no perdió en los cuatro partidos que disputó como local ante rivales argentinos en series eliminatorias de torneos CONMEBOL, con dos victorias (por Sudamericana) y dos empates (Libertadores).