Las nuevas reglas de juego impuestas por Donald Trump a la economía de Estados Unidos mediante una dura política proteccionista, han cambiado el panorama del comercio mundial alentando a nuevos actores a buscar alternativas competitivas, en las que debe actuar el Mercosur como eje de oferta regional. 


En ese sentido están bien encaminadas las estrategias acordadas por los principales socios comerciales, Argentina y Brasil, para avanzar hacia una apertura tanto para reactivar el Mercosur con toda la dinámica que lo lleve a vincularse con la mayor cantidad de mercados posibles, como también atendiendo el vacío dejado por Trump.  


Los resultados de la III Reunión de la Comisión Bilateral de Producción y Comercio, que se desarrolló en Brasilia con equipos políticos y técnicos de delegaciones argentina y brasileña, muestran resultados basados en una estrategia que involucra varios temas. Particularmente se centran en el comercio, agro, pymes, emprendimientos e innovación, inversiones, defensa comercial y competencia, y coherencia regulatoria. Para las representaciones, se avanzó en dos días más que en los últimos 20 años de vigencia del grupo. 


Según el ministro argentino de Producción, Francisco Cabrera, este mecanismo de diálogo bilateral económico, creado el año pasado, busca en el corto plazo crear en el Mercosur una plataforma desde la cual aprovechar la oportunidad de una apertura inteligente al mundo y apunta hacia acuerdos comerciales con la Unión Europea, Canadá, Japón, India y la Asociación Europea de Libre Comercio integrada por Suiza, Liechtenstein, Noruega e Islandia. 


Si se concreta la política norteamericana de revisar sus acuerdos comerciales, habrá muchos socios del sudeste asiático con los que se firmó el Acuerdo Transpacífico (TPP) que replantearán su política exterior, y esto constituye de hecho una oportunidad para el Mercosur. Más todavía si los gobiernos de Brasil y de Argentina han expresado sus intenciones de integrarse comercialmente a la Alianza del Pacífico (Colombia, Perú, México y Chile), e incluso el presidente Mauricio Macri ya asistió como observador a la última reunión de ese bloque.