Desde hace un tiempo a esta parte, incluso antes del inicio de la pandemia provocada por el covid-19, se viene planteando en el ámbito educativo la necesidad de mejorar la calidad de enseñanza para alcanzar niveles acordes a las necesidades actuales. En ese marco se ha venido hablando de la diferencia entre la educación pública y la privada y de las brechas que se han ido estableciendo marcando la gran diferencia que se ha dado entre ambos tipos de educación desde el nivel primario hasta el universitario.
Con la declaración de la pandemia y las restricciones que se establecieron al suspenderse las clases dentro del aislamiento social, preventivo y obligatorio, la diferencia entre escuela pública y privada se allanó considerablemente aunque esto no implicó que desapareciera totalmente. Por el contrario, hay casos en que las brechas se ampliaron de acuerdo al nivel social y son aquellos casos en que los alumnos siguieron con un ritmo sostenido un proceso de enseñanza que, prácticamente, no se vio interrumpido gracias a los recursos técnicos y didácticos disponibles, mientras que otros estuvieron durante meses sin experimentar un avance concreto, lo que llevó a las autoridades a tomar curiosas medidas en relación a la evaluación "nivelando para abajo" como la mayoría considera que ha ocurrido.
Con el inicio de un nuevo ciclo escolar, que se espera resulte normal siempre y cuando las condiciones sanitarias lo permitan, volverá sin ninguna duda, a plantearse la conveniencia de uno u otro sistema y la necesidad de achicar las brechas que se fueron abriendo en forma notoria.
Como se vaticina será un año muy duro, en el que en un primer momento se tendrá que trabajar en la nivelación de los alumnos, para luego comenzar a impartir los contenidos.
Se espera también que durante el año se avance en una actualización de los contenidos para alcanzar mejores niveles de enseñanza y, por lo consiguiente, un mejor nivel educativo acorde al que existe en otros lugares del mundo.
En forma simultánea se tendrá que insistir en el perfeccionamiento docente, ya que ésta es la llave de la transformación que se pretende alcanzar. Sin docentes capacitados que dejen de estar anclados en un modelo de enseñanza antiguo y poco innovador y sin una actualización pedagógica no se podrá alcanzar el objetivo de una mejor educación que achique las brechas que se han establecido en el ámbito educativo en los distintos niveles de enseñanza.
