Los mercados habían proyectado que la inflación de marzo rondaría el 12,5 %, por eso el 11% que finalmente determinó a nivel nacional el Indec -en San Juan inclusive fue menor al registrarse un 9,8%- fue recibido con beneplácito por todos los sectores que están bregando para que este mal de la economía argentina cese y posibilite la pronta recuperación del país. Pero no sólo la disminución del índice de marzo fue motivo de satisfacción del equipo económico del Gobierno nacional, sino también de que es el tercer mes consecutivo en que la inflación baja, lo que marca una tendencia que de acuerdo a lo previsto continuará en los próximos meses con marcas de un solo dígito hasta llegar al cero por ciento a fines de este año.

El índice de precios al consumidor de enero pasado alcanzó una suba del 20,6 % , mientras que el de febrero tuvo una suba del 13,2% con una variación acumulada del 36,6%. El 11% que se ha registrado en marzo representa el índice más bajo desde que asumió Javier Milei a la presidencia y recibió el gobierno con una inflación de más del 12,8 por ciento mensual que se proyectó a diciembre, en un efecto de arrastre después del proceso eleccionario, alcanzando el 25,5%. A partir de ese momento una estricta política de ajuste fiscal y monetario marcó el inicio de un proceso de descenso hasta la fecha en que se ha llegado al 11% mensual con una variación desde enero del 51,6 por ciento.

Lógicamente que estos niveles de inflación todavía son muy altos y colocan a nuestro país entre las naciones con más elevado índice a nivel mundial, un fenómeno que las autoridades esperan que se vaya regulando en la medida que comiencen a dar resultados las acciones implementadas para mejorar las condiciones macroeconómicas y luego las de la economía interna.

No se puede dejar de mencionar en el análisis que con el último incremento, la variación interanual que incluye desde marzo del año pasado es del 287,9% lo que coloca a este período en el nivel más alto de los últimos 33 años.

Los rubros Educación, Comunicaciones y Vivienda con agua, electricidad, gas y combustibles, por el aumento de cuotas escolares, alzas en las tarifas de telefonía e internet y por el incremento de las facturas de electricidad, fueron los que más incremento sufrieron y los que han hecho que el índice general de precios no fuera más bajo de lo que ha sido. 

El fenómeno de que en San Juan la inflación fuera menor a la registrada a nivel nacional, desde octubre del año pasado cuando este índice se ubicó en el 7,9%, tuvo sus causas en la desaceleración de aumentos de precios en productos de la canasta familiar, según el informe de la consultora privada que reveló este comportamiento.

Hay otros factores que en nuestra provincia inciden en que los precios no tengan el mismo comportamiento que en otras provincias, especialmente Buenos Aires, donde hay valores que suelen colocarse por encima de los que se manejan en San Juan.

Existen fundadas esperanzas en que la inflación será finalmente controlada en la medida que se contengan el déficit fiscal y desaparezca la especulación que ejercen algunos sectores, lo mismo que se reduzcan las pretensiones salariales y se avance en algunas reformas básicas como la laboral.