De un tiempo a esta parte, el tránsito por la Ruta Nacional A040, conocida como Avenida de Circunvalación Federico Cantoni, no sólo se ha vuelto denso en relación a la gran cantidad de automotores en circulación, sino que también se ha hecho peligroso por la forma de conducir de algunos automovilistas y conductores de distintos tipos de rodados.
El exceso de velocidad es una de las transgresiones más comunes. Si bien, la autopista es una vía rápida de circulación, por sus características está habilitada por las autoridades viales con un máximo de hasta 80 km/h. Esto hace que en forma frecuente los automovilistas transgredan ese límite que para algunos es muy escaso, teniendo en cuenta las características de los vehículos modernos que se distinguen por su capacidad de aceleración y frenado.
De todas formas, los controles de velocidad, que suele implementar Gendarmería Nacional (por ser una ruta nacional) son esporádicos, por lo que se deja a los conductores en libertad de circular como más se desee, con grandes diferencias entre los que acatan los límites y quienes no los respetan para hacer que el tránsito sea más seguro.
Las maniobras imprevistas mientras se circula ocupan el segundo lugar dentro de las transgresiones más habituales en los 16 kilómetros a lo largo de la Avenida. Esta falta de tránsito puede darse mientras se circula por el anillo vial y responde a sobrepasos de vehículos o a frenadas bruscas.
La otra posibilidad es que la maniobra brusca se produzca al intentar salir de la avenida y el conductor es sorprendido por una de las vías, por no contarse con la señalización adecuada. Es cuando un conductor se da cuenta que tiene la salida de la autopista e intenta tomarla sin tiempo para colocar las luces de giro o hacerle debidas señas a los demás conductores de que va tomar imprevistamente ese camino.
Hay otra serie de irregularidades que ponen en riesgo el tránsito y que son cometidas por personas muy cuidadosas. Circular demasiado despacio en una autopista puede ser motivo de graves accidentes. En ese caso el vehículo es un obstáculo para el resto debiendo los otros automovilistas, en algunos casos, reducir bruscamente la velocidad corriendo el riesgo de ser colisionados desde atrás.
La falta de controles viales es evidente y es por ello que en los horarios picos se observan numerosas transgresiones que ya se han hecho común. Son las mismas que están provocando que el tránsito cada vez sea más inseguro y que haya conductores que toman la Avenida como una pista de carreras sin respetar las limitaciones que tiene en la actualidad.
