El paro de actividades anunciado, para el próximo miércoles 23 del corriente, por la Unión de Docentes Agremiados Provinciales (UDAP) en apoyo a la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) refleja la absurda forma en que la mayoría de los gremios están actuando, en momentos que el país atraviesa por una delicada situación económica financiera. Otro sector sindical que ha anunciado, sin mayor contemplación, cinco días de paro es la Asociación de Docentes Investigadores y Creadores de la Universidad Nacional de San Juan (ADICUS), en este caso en coordinación con la Conadu. Es lamentable que a dos de los más numerosos gremios educativos no se les ocurra otra medida de acción que no sea ir al paro, conociendo el mal que provoca en los alumnos la interrupción del ritmo de enseñanza, o perder días u horas de clases.
El paro de UDAP es doblemente reprochable ya que se hace en apoyo de CTERA a nivel nacional, cuando ya ha cerrado convenientemente su negociación paritaria en la provincia. Por otra parte, la medida de fuerza se cumple el próximo miércoles 23, dos días antes del feriado del 25 de Mayo, dejando un día "sandwich” que difícilmente sea aprovechado educativamente, y que limita la semana escolar a tres días de clases. ¡Hermosa enseñanza de entrega y patriotismo en la Semana de Mayo!
Algo parecido ocurre con ADICUS. Sus paros están previstos para el 22 y 23 del corriente dejando dos días de clases al inicio de la semana y un día previo al feriado nacional, como para que no los acusen de tomarse toda una semana de "vacaciones”. El resto de los días de paro serán el 28, 29 y 30, como para garantizar un fin de semana "súper extra largo” en el que los profesores no concurrirán a las aulas y los estudiantes comenzarán a considerar que haberse inscripto en la Universidad es una pérdida de tiempo.
También hay que tener en cuenta el contexto en que se dan estas medidas de fuerza, para advertir que son un despropósito. Por un lado hay que considerar que se trata de gremios vinculados a la educación, responsable de la formación de las nuevas generaciones. Por otra parte, la situación económica financiera del país que no da para más, lo que ha motivado que las autoridades de gobierno pidan colaboración a todos los sectores de la sociedad, para tratar de salir de esta gran encrucijada.
