A una semana del malogrado recital del Indio Solari en Olavarría, queda la sensación de que si no se profundiza la investigación iniciada, en poco tiempo más las dos muertes, los cientos de heridos y miles de personas extraviadas, serán sólo un recuerdo doloroso pero sin culpables visibles, como ha ocurrido tantas veces en este país. Quienes intervinieron en la organización del trágico mega recital conforman una lista bastante extensa y ninguno de ellos debería quedar sin ser sancionados, ya que a todos les compete alguna responsabilidad. 

Recordemos que la causa iniciada por la fiscal Susana Alonso está caratulada, por el momento, como "averiguación de causales de muerte+ de Javier León y Juan Francisco Bulacio, y los que están compareciendo ante ella son el Indio Solari; los hermanos Marcos y Matías Peuscovich, de la productora "En vivo group SA”; el intendente de Olavarría, Ezequiel Galli; las autoridades de la Policía bonaerense, como también del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, que encabeza Cristian Ritondo, de muy bajo perfil en este suceso. 

Para investigar hay varios aspectos, entre ellos lo ocurrido dentro del predio ferial "La Colmena”; la sobreventa de entradas; la falta de controles en los accesos; el exceso de personas en el predio; la escasa seguridad privada y de policías para proteger la vida y bienes de los concurrentes. También la presunta venta de alcohol y drogas.  

Conforme a lo que se ha investigado varios de los actores, especialmente los productores, podrían ser acusados de estrago doloso, cohecho e incluso por homicidio culposo. Por su parte el cantante Solari y el intendente de Olavarría, ya declararon en condición de testigos, pero su situación procesal podría cambiar una vez que se completen las pericias. Es también lamentable el papel desempeñado por la policía local y el Ministerio de Seguridad Bonaerense, que no estuvieron a la altura de las circunstancias para actuar en forma preventiva. 

El intendente Galli es de la misma extracción política que la Gobernadora de Buenos Aires, sin embargo en ningún momento atinó a pedir ayuda al Gobierno nacional, en un hecho que según el propio jefe comunal "se nos fue de las manos”.