Finalmente Venezuela quedó apartada el viernes último como Estado miembro de pleno derecho deI Mercado Común del Sur (Mercosur) al que había ingresado en 2012 por impulso del populismo consustanciado con la doctrina bolivariana de Hugo Chávez. El plazo otorgado al presidente Nicolás Maduro por los países fundadores del bloque comercial, para que corrija el incumplimiento de las obligaciones asumidas en el Protocolo de Adhesión, fue ignorado abiertamente no obstante el tiempo transcurrido.
Durante los últimos meses Venezuela ha mantenido una actitud desafiante contra las naciones fundadoras del bloque. La canciller Delcy Rodríguez, sostuvo que el gobierno venezolano está sufriendo "agresiones y hostigamiento” por parte del resto del grupo y por ello Maduro Asumió la presidencia pro témpore del organismo que, asegura, le correspondía plenamente a Venezuela.
De acuerdo al cronograma trazado para este año, en realidad esa presidencia estaba prevista, pero no en el marco de la crisis política, económica y humanitaria que afecta a Venezuela. Es que Maduro ha ignorado que el acuerdo de complementación económica que rige y en particular el protocolo de Asunción sobre Derechos Humanos, son instrumentos jurídicos fundamentales para el proceso de integración, que califica la condición "sine qua non” para ser miembro pleno.
También se deben respetar la formas para ser titular temporario del Mercosur y esa potestad se otorga en una cumbre de cancilleres -este año no hubo-, que es donde se transmite la presidencia. Maduro lo hizo por su cuenta, en forma prepotente, como se maneja. Ahora el encuentro bianual será el 14 de este mes, y Argentina asumirá la cabeza de la organización.
Es que los intereses económicos del bloque están íntimamente ligados a la democracia de las naciones que lo integran y el Estado de derecho no es opcional en cuanto a deberes y obligaciones. La integración regional no admite ningún sistema de gobierno que no se sustente en el pluralismo de ideas y el respeto de las libertades inalienables.
Con la posición venezolana sería imposible negociar con la Unión Europea o avanzar hacia la Alianza del Pacífico u otro bloque donde la sana convivencia es parte del intercambio.
