El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) -según sus siglas en inglés- acaba de hacer público un estudio denominado 'Naturaleza sin plásticos'', en el que hace una evaluación de la ingestión humana de plásticos presentes en la naturaleza, concluyendo que es necesario hacer un llamado a los gobernantes de todo el mundo para implementar acciones que eviten el aumento de la contaminación de ese material.

El organismo ha puesto como ejemplo que sin una persona ingiere semanalmente 5 gramos de plástico, que pueden estar presentes en el agua, los alimentos o el aire que se respira, esa cantidad es equivalente al mismo plástico que contiene una tarjeta de crédito.

En realidad, el mal mayor lo están provocando los microplásticos, que son todas aquellas partículas de plástico que miden menos de 5 milímetros y que son fabricados para contener sustancias extra en geles de baño, cremas y productos de belleza en general. También pueden generarse de la degradación y desgaste de plásticos más grandes, como bolsas y plásticos sólidos. Por su reducido tamaño son muy difíciles de eliminar de distintas superficies como el agua y de otros ámbitos en que los microplásticos se acumulan con gran facilidad. 

Actualmente, la contaminación por plásticos afecta el ambiente de la mayoría de las especies del planeta, y es tanta la cantidad de desechos de este tipo que se han encontrado acumulaciones en la profunda fosa de las Marianas, en el Océano Pacífico, en el hielo del Mar Ártico y a manera de islas en la desembocadura de numerosos ríos. A consecuencia de esta proliferación de microplásticos especímenes de más de 270 especies murieron en todo el mundo por haber ingerido estos desechos. Por otra parte se ha comprobado que los microplásticos afectan las propiedades del suelo, al provocar el filtrado de químicos dañinos para la flora y la fauna.

En relación a los efectos que provocan en los humanos, WWF aclaró que todavía no tiene bien documentadas las consecuencias, pero algunos estudios han determinado que inhalar fibras plásticas puede causar inflación del tracto respiratorio, y los residuos con colorantes o pigmentos pueden afectar el desempeño sexual y la fertilidad, y provocar mutaciones y distintos tipos de cáncer. El Fondo también realizó una serie de recomendaciones para reducir los microplásticos en todo el mundo. Entre ellas está la de apoyar investigaciones para determinar la incidencia de los microplásticos en los organismos vivos; acordar un tratado internacional, vinculado jurídicamente, para frenar el derrame de plásticos, con el fin de hacer frente a la contaminación por plásticos a escala global y establecer metas nacionales para la reducción del consumo de plásticos, el aumento de reciclaje y el mejor manejo de residuos de plástico, entre otras.