Indefectiblemente San Juan avanza hacia la "nueva normalidad" flexibilizando sectores claves de la vida provincial, que son los que están permitiendo que la actividad económica comience a recuperarse. Tras la parálisis provocada por la pandemia del coronavirus, hace más de dos meses, la provincia ha ido liberando gradualmente tareas que han permitido a varios rubros restablecerse, lo que es muy promisorio si tenemos en cuenta la situación en que se encuentran otras jurisdicciones del país, como la Ciudad Autónoma de Buenos Aires o el área del Gran Buenos Aires, donde no sólo se siguen dando varios casos por día de contagios del Covid-19, sino que han tenido que retroceder en sus respectivas cuarentenas y cerrar negocios que ya habían sido habilitados.

En San Juan, los avances obtenidos hasta ahora en el control de la pandemia han hecho posible que actividades vinculadas a la producción rural, la industria y la construcción, y otras afines a estos rubros, se hayan restablecido quedando algunos sectores menores a la espera de normalizar sus tareas. Estas empresas o industrias, que en su gran mayoría, están emplazados en zonas periféricas de la ciudad de San Juan o en los departamentos, ofrecen mucha seguridad respecto del Covid-19 ya que, por lo general, están radicadas en sectores poco poblados, en los que resulta sencillo cumplir con las normas establecidas, entre ellas el distanciamiento social que se aconseja. Hay que tener en cuenta que los obreros y operarios que en ellas trabajan se movilizan en medios propios o concurren caminando a sus trabajos. Por otra parte desarrollan la mayor parte de sus tareas en espacios abiertos o en instalaciones lo suficientemente grande como para evitar aglomeraciones, por lo que es muy poco probable que el virus pueda contagiarse en un ámbito de estas características.

El Gobierno, a través del Comité Covid-19, deberá tomar en cuenta todas esas consideraciones y continuar con el proceso de flexibilización de la cuarentena dando prioridad a las actividades productivas en una etapa de normalización que mientras más rápido se implemente resultará menos perjudicial y traumática.

La persistencia de controles interdepartamentales y otras medidas similares que han sido muy importantes a la hora de evitar que el virus se propagara dentro de la provincia, se está convirtiendo en un obstáculo para la libre circulación de personal técnico y administrativo que necesita trasladarse de un departamento a otro por asuntos empresariales.

La "nueva normalidad" impone que todo lo vinculado a la producción tenga prioridad, por lo que se tendrá que trabajar con ese propósito, siempre con la mayor precaución posible.