Los beneficios que trajo Internet al mundo globalizado es uno de los hitos más relevantes en la historia de la humanidad porque la comunicación instantánea es parte de todos los órdenes de la vida. Pero como en los grandes adelantos de la evolución social el sistema presenta sus fallas, donde lo más grave son las noticias falsas, tendenciosas y, en el mejor de los casos, atrapa a un lector desprevenido carente de espíritu crítico para diferenciar la información real de una tendenciosa.
El problema es que está de por medio la libertad de expresión y tomar medidas contra la manipulación noticiosa puede llegar a la censura, lo que es peor. Por ello la responsabilidad de garantizar la calidad informativa es en principio de los operadores de las plataformas y por ello merece destacarse la última embestida de Twitter contra el delito, al anunciar el cierre de miles de cuentas en todo el mundo por difundir noticias falsas. La medida es parte de las políticas de confiabilidad de esa compañía.
Así como Twitter, Facebook, Google y otras prestadoras se han endurecido contra la manipulación de la opinión pública, como ocurre en tiempos electorales por ejemplo, la gran preocupación surge de las tácticas empleadas por numerosos gobiernos contra otras naciones para generar conflictos caso de los recientes en Oriente Medio y Hong Kong. En este último con intervención indirecta de China continental utilizando terceros países como Egipto.
La práctica distorsiva en la web señala a los gobiernos e instituciones más sospechosos: Irán, Rusia, Venezuela, China y partidos políticos españoles. Este tráfico ilegal se produce a gran velocidad por lo que el efecto es inmediato y de no constatarse la veracidad, los riesgos de una confrontación armada sustentada en las "fake news" o noticias falsas pueden ser inevitables.
En nuestro país una información falsa, inexacta o equívoca puede afectar garantías constitucionales por lo que el principio de responsabilidad social obliga a rectificarlas y a precisar el origen tendencioso. La prensa independiente también está expuesta al riesgo de la viralización de las noticias confusas y se obliga a extremar el chequeo informativo hasta verificar la realidad del contenido.
Lo ideal es contar con una plataforma tecnológica para detectar informaciones falsas o manipuladas de cada país, como es el Sistema de Alerta Rápida contra la desinformación que ha instalado la Unión Europea. De esta manera se pone en marcha una advertencia para que los usuarios de la web reciban en forma casi instantánea el correspondiente desmentido. Es un anticuerpo del Estado de derecho para tenerlo en cuenta e imitarlo en nuestra región.