Los productores semilleros de San Juan siguen a la espera de la implementación de medidas que impliquen mejores condiciones para la productividad, incorporando algo que resulta decisivo en la actividad como es el desarrollo tecnológico que hace posible mayores volúmenes con una óptima calidad. Las modificaciones propuestas para la Ley Nacional de Semillas, vigente desde 1973, continúan sin poder implementarse, por falta de acuerdo legislativo, y es uno de los factores que están demorando los incentivos que le hacen falta a esta actividad, que en la última Expoagro 2020, realizada en San Nicolás, provincia de Buenos Aires, concitó gran interés por la incidencia que tiene para el mercado agrícola.


La falta de una adecuación de la Ley de Semillas ha hecho que el sector pierda mucho mucho terreno en una actividad en la que provincias como San Juan tiene un gran potencial y la posibilidad de liderar un gran mercado.


En agosto del año pasado el Gobierno nacional estuvo dispuesto a avanzar decididamente en este tema, mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), pero una nueva dilatación de los tiempos hizo que el objetivo se aplazara, postergando una vez más al sector.


Un nuevo marco regulatorio mejoraría las condiciones de venta de semillas, garantizando inversiones y haciendo ganar competitividad a un sector que por su postergación está sufriendo un atraso desde el punto de vista tecnológico, a pesar de contar con el aporte de prestigiosas instituciones dedicadas a la investigación en el rubro.


En San Juan la producción de semillas se ha centrado en la zona de los valles de los departamentos cordilleranos donde existen inmejorables condiciones ambientales y climáticas.


A pesar de esta postergación en San Juan hay varias firmas y entidades que siguen trabajando en mejorar la calidad y volúmenes de producción mediante la incorporación de la mejor tecnología que está al alcance de los productores. Esto hace posible en varios sitios la trilla de lotes de acelgas, remolachas hortícolas, rúculas y rabanitos, con una eficiencia muy alta. También se están produciendo semillas de zapallo gris plomo, anco, cebolla morada, temprana, lechugas y remolacha.


Los esfuerzos para mejorar la producción semillera se están haciendo en todos los sentidos y de diferentes maneras. Es de esperar que con una legislación adecuada y el apoyo de organismos oficiales como el Instituto Tecnológico y Hortícola Semillero, y el Instituto de Investigación y Desarrollo Agroindustrial, Hortícola y Semillero (Insemi), se conseguirá una mayor productividad mejorando la calidad, que es uno de los principales requerimientos.