La FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), con el apoyo del gobierno de Italia, ha vuelto a la carga con una iniciativa que supo implementar en 2015, pero que no alcanzó la trascendencia necesaria. Ahora, dentro de una campaña para promover dietas saludables, por los problemas de alimentación que hay en el mundo, y en cumplimiento de la Agenda 2030, establecida por la ONU (Organización de las Naciones Unidas) en relación al compromiso de alcanzar el desarrollo sostenible a favor de las personas y el planeta, insistirá en la tarea de concientizar sobre la conveniencia de la dieta mediterránea como recurso para solucionar muchos de los problemas de nutrición por malos hábitos alimenticios.

Se ha tenido en cuenta que el crecimiento demográfico, la globalización, la urbanización y las presiones económicas están provocando profundos cambios en los sistemas alimentarios y hábitos de consumo, lo que conduce a dietas poco saludables con consecuencias alarmantes para la salud y la vida de las personas. Ante este panorama surge la dieta mediterránea como una alternativa válida para garantizar una buena alimentación en base a productos de la tierra que son muy beneficios para la salud. Esta dieta consiste en un patrón alimentario basado en los ingredientes propios de la agricultura local de países con clima mediterráneo. Incluye verduras y legumbres, frutas, pescado, carnes blancas, pastas, arroz, frutos secos y carnes en general en forma moderada. Además contempla el consumo de aceite de oliva y vino con moderación.

Con el gobierno italiano la FAO ha realizado una experiencia piloto en el Líbano y Túnez, para promover la adopción de esa dieta. Los resultados obtenidos serán volcados en esta nueva campaña que pretende hacerse extensiva a otras naciones o regiones con similares problemas de alimentación.

Conceptos básicos de esta iniciativa, como la necesidad de promover dietas tradicionales, saludables y sostenibles que conlleven a garantizar la seguridad alimentaria y nutrición, son objetivos generales de países como la Argentina ante el estado de emergencia alimentaria en la que se encuentra parte de su población.

La próxima recordación de la creación de la FAO -el 16 de octubre de 1945- coincidirá con el Día Mundial de la Alimentación, que este año ha sido dedicado a la promoción de las dietas saludables, una de las mayores necesidades en varios puntos del planeta. Será el momento de tratar de imponer un viejo concepto en materia de alimentación a fin de contrarrestar la mala influencia de las comidas rápidas o "chatarra''.