Era cuestión de tiempo para que Argentina dejara de pertenecer a la Unasur. El presidente Macri ya había anticipado que este organismo creado en 2008 por iniciativa de Hugo Chávez y Luis Ignacio Lula Da Silva era el último error, donde prevaleció la ideología y los perjuicios en vez de buscar satisfacer las necesidades de la gente.


El alejamiento de nuestro país de esta superestructura -ya que debía estar conformada por parlamentarios representantes de cada uno de los países miembros- se comenzó a efectivizar con las precisas instrucciones que el canciller Jorge Faurie dio al subsecretario de Asuntos de América de la Cancillería, Leopoldo Sahores, para que comunique oficialmente que "el país renuncia al tratado".


Desde el inicio de su gestión, Macri dio a entender su decisión de flexibilizar a la Unasur, eliminando cargos que se habían otorgado sin ningún tipo de concurso y anunciando que bajaría costos al reducir los gastos de los miembros de esta superestructura.


La lista de países que dejaron de pertenecer al Unasur lo integran Brasil, Chile, Ecuador, Colombia, Paraguay y Perú. Ahora, se suma la Argentina, algo que se estaba esperando y que se demoró considerablemente, teniendo en cuenta que el Gobierno nacional ya había anticipado en numerosas ocasiones la necesidad de salir de este bloque.


Todo indica que Argentina se abocará a consolidar un nuevo bloque llamado Prosur, que en realidad es un foro para el Progreso y el Desarrollo de América del Sur, como reza la explicación de esta sigla.


El Prosur fue impulsado por el presidente de Chile, Sebastián Piñera, quien lo presentó en sociedad el 22 de marzo pasado en un acto que tuvo lugar en el Palacio de la Moneda de Chile. En la ocasión el presidente Macri firmó la Declaración Presidencial en busca de alcanzar la Renovación y el Fortalecimiento de la Integración de América del Sur, un replanteo general de las relaciones entre los países de la región, que deberán seguir trabajando en busca de consolidar ese sentido de unión y desarrollo.


Para concretar el alejamiento, nuestro país debe presentar una comunicación formal al Gobierno de Ecuador, ya que este es el depositario del Tratado Constitutivo de la Unasur.


La Argentina ha dado un paso fundamental en dejar de lado una estructura que desde su creación no ha contribuido en nada con los países miembros y, por el contrario, ha implicado un gasto innecesario reflejado en la postulación, elección y sueldos asignados a los parlamentarios.