Dentro del proceso de recuperación económica que le tocará enfrentar al país, una vez superada la crisis desatada por el Covid-19, la producción agropecuaria de cada una de las regiones tendrá un papel preponderante. Por ello se estima que será necesario cada vez más contar con expertos egresados de las escuelas agrotécnicas, capacitados en nuevas tecnologías aplicables a la producción, que puedan ser capaces de desempeñarse eficientemente en los nuevos emprendimientos frutihortícolas y ganaderos que encare cada provincia o región para producir alimentos no solo para consumo interno, sino también para la exportación, que es lo que permitirá el ingreso de divisas.

Dentro de este panorama las escuelas agrotécnicas tendrán, a partir de ahora, que optimizar el número y nivel de sus egresados, ya que de ellos dependerá en gran medida la mejora en los niveles de producción.

Si bien las escuelas agrotécnicas que funcionan en nuestra provincia están pasando por una etapa de aletargamiento, producto de la crisis económica originada en años anteriores y por la nueva situación producto de la crisis del coronavirus, a lo que se suma la falta de definiciones administrativas y pedagógicas de las autoridades educativas actuales que hacen, por ejemplo, que el cargo de supervisor general de enseñanza agropecuaria no esté cubierto, se observa una preferencia de los estudiantes por inscribirse en estos establecimientos. Esto se puede observar en los últimos ocho años, cuando la matrícula de alumnos que optaron por concurrir a estas escuelas aumentó el 14,4% respecto de las inscripciones en los secundarios normales.

San Juan tiene actualmente 13 escuelas de enseñanza agropecuaria que funcionan en 10 de los 19 departamentos de la provincia y de los que egresan en promedio un centenar de alumnos. Durante la cuarentena alumnos y profesores han combinado la educación a distancia con la asistencia por turnos para mantener chacras y animales que poseen en algunos establecimientos, tareas que podrían reanudarse normalmente teniendo en cuenta la poca incidencia que tiene el virus en esos ámbitos.

Las escuelas están en Valle Fértil; en Villa Mercedes y Huaco, en Jáchal; 9 de Julio; Médano de Oro en Rawson; Zonda; Capital; Caucete; 25 de Mayo; Iglesia, Sarmiento, Calingasta y San Martín. Cada una de ellas está en condiciones de efectuar un importante aporte en sus respectivas jurisdicciones, por lo que es necesario apuntalar su gestión con la incorporación de la enseñanza de nuevas tecnologías para incrementar volúmenes de producción y mejorar la calidad de los cultivos. El replanteo de los recursos pedagógicos, junto a un adecuado equipamiento tecnológico de los establecimientos también es básico para mejorar el nivel de los egresados y garantizar su inserción laboral.