Nuestro país basa una buena parte de su política exportadora en el funcionamiento de los puertos, por ello en estos días se ha conocido una buena noticia para la actividad. Se ha observado una baja de los costos portuarios, a partir de la detención del líder del Sindicato de Obreros Marítimos, Omar "Caballo'' Suárez, en septiembre del año pasado.

Se calcula que los costos de estiba bajaron, desde ese momento, alrededor del 40%, ya que estaban inflados por la acción que ejercía el dirigente gremial a quien se lo acusó de jefe y organizador de una asociación ilícita y de ejercer coacción agravada contra empresarios navieros y administración fraudulenta, en detrimento del sindicato que lideraba. 


Esta reducción de costos, se da en un contexto internacional en la que los fletes marítimos reflejaron la baja en el precio del petróleo y la disminución del comercio internacional. 


A pesar de las dificultades actuales, Argentina asoma a una nueva perspectiva comercial a partir de detectar nichos de corrupción que estuvieron perjudicando. Liberar a las principales actividades económicas de estos males influirá positivamente para un crecimiento sostenido.