El expresidente de Chile, Sebastián Piñera (2010-2014), ligado muy estrechamente al presidente Macri por su profesión universitaria en ingeniería y su pasado en el mundo empresario, formuló hace unos días una serie de apreciaciones vinculadas al primer año de gobierno del mandatario argentino, elogiando algunas medidas y siendo crítico con otras. Dijo que la cirugía mayor o política de shock era la única forma de poner de pie a la Argentina, para que vuelva a desarrollarse y Macri tomó esa decisión. 


Cree que han sido sentadas las bases para el futuro desarrollo del país, a pesar de que 2016 fue un año muy duro, en el que no hubo crecimiento ni creación de empleo, y la inflación y el déficit fueron muy altos. En ese sentido vaticinó que 2017 va a ser mucho mejor, y que después de cinco años la Argentina volverá a crecer. 


Conforme a su experiencia, desde el exterior la Argentina se ve como un país que siempre se ha caracterizado por tener una economía muy cerrada. Exporta básicamente materias primas con ventajas para la soja, trigo, granos y carne, pero no avanza en procesos de industrialización que aporte valor agregado. La clave es abrirse al mundo aumentando la capacidad de innovar, de emprender y de incorporar ciencia y tecnología en los procesos productivos y de comercialización. 


Una economía más liberal le ayudaría a crecer, pero esta a la vez tiene que mostrarse más solidaria, ya que no es posible que haya uno de cada tres argentinos viviendo en la pobreza . 


Respecto de los empresarios que se dedican a la política dijo que hay una regla de oro para quienes eligen la función pública. Consiste en hacer que el bien público predomine siempre por sobre cualquier otro interés. Confió en que el presidente Macri piensa lo mismo y que eso ayudará a disipar dudas y conflictos de intereses que existen en este momento. 


Los dichos de Sebastián Piñera adquieren relevancia si consideramos que fue el último mandatario chileno de centro derecha que tuvo ese país. Si bien, tanto su figura como su gobierno mantuvo niveles de aprobación y rechazo variables, logró sobreponerse a vario conflictos y concluir su mandato con cierto oxígeno como para tener la esperanza de volver a postularse para las próximas elecciones.