Desde el último tercio del siglo pasado hasta la actualidad la educación argentina ha experimentado un franco retroceso como ha quedado demostrado en todas las mediciones del nivel educativo, especialmente la que está plasmada en el informe PISA (Programa para la evaluación de estudiantes internacionales), que realiza OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) y que mide el rendimiento académico de estudiantes de hasta 15 años de edad. A esto se debe sumar la ubicación del país en el ranking educativo mundial que lo sitúa en el puesto 62 entre 79 países evaluados, una situación que es lamentable por la implicancia que tiene en la consideración educativa a nivel mundial. Este es uno de los argumentos por los que el Ministerio de Educación de la Nación, propuso recientemente implementar una hora más de clases en las escuelas primarias de todo el país, a fin de alcanzar una educación de calidad que permita a la Argentina recuperar parte del prestigio que alguna vez ostentó ante la comunidad internacional. 


Llegar a los 180 días de clases fue la meta inicial planteada por las autoridades de educación, pero es evidente que este número no alcanza para lograr el objetivo de recuperar la educación argentina. Además con esta cifra la Argentina se ubica en la posición 30 entre los países con más días de clases, por debajo del promedio de OCDE que se encuentra entre los países que tiene más de 185 días de clases. Para tener una idea del lugar que ocupa el país, a nivel mundial hay otras naciones que tienen muchos más días de clases lo que les ha permitido excelentes resultados educativos. Entre ellos está Israel con 219 días; Japón con 201; Australia con 200; Dinamarca, 200; Italia, 200; México, 200; Brasil, 200 y República Checa, 196. 


Según el ministro de Educación de la Nación, Jaime Perczyk, con una hora más de clase por día la Argentina pasara de tener 720 horas de clases por año a 950. Si bien no se puede asegurar que con esta nueva cifra se mejorará el nivel educativo, numerosos expertos en educación han considerado que lo importante del anuncio es que se ha tomado conciencia y se ha actuado en consecuencia con una medida que incidirá de todos modos en la calidad educativa. 


Alcanzar la excelencia en educación es un compromiso de todos y no se pueden estar poniendo obstáculos, como lo están haciendo algunos sectores gremiales o de los mismos gobiernos provinciales, ante una medida que es beneficiosa para intentar revertir la caída educativa que ha experimentado el país.