Productores frutihortícolas de la provincia, junto a las autoridades del gobierno de San Juan deben enfocarse más puntualmente en mejorar la calidad de la producción a fin de ganar mercados en el exterior que les posibiliten incrementar el nivel de exportaciones. Uno de los aspectos a tener en cuenta para lograr este objetivo es la calidad organoléptica de cada fruto, dada por la ausencia de defectos, la textura, el “flavor” y el aspecto externo -incluyendo el tamaño, color y forma- requisitos necesarios para cautivar los mercados externos y recuperar lugares que se han perdido en varias latitudes del planeta.

Respecto de la producción vitivinícola, uno de los pilares en los que se ha basado la economía sanjuanina, es notoria la reducción de vinos para exportación ya que, por ejemplo, en Gran Bretaña, uno de los principales centros de recepción de vino sanjuanino, al igual que Estados Unidos, la demanda se ha reducido bruscamente pasando del 85% al 40% e incorporando la modalidad de envío de vinos a granel que es menos redituable. Otro fenómeno que se da en este sentido y, donde empieza a tener incidencia la calidad de los vinos, es que la Argentina con un mayor volumen de despachos, obtiene menos utilidades que, por ejemplo, Portugal que ha superado en ganancias a nuestro país con menor cantidad de vinos exportables, cercana al 25 por ciento. Esto es una clara evidencia de que sin calidad no se pueden alcanzar las ganancias que se esperan, y esto debe ir de la mano de un mayor valor agregado a la materia prima y una cada vez más innovadora presentación de los productos para que lleguen en una forma más directa y práctica a los consumidores. Esta manera de presentar cada producto es lo que también lleva a que esta oferta logre en el tiempo estabilidad y permanencia, dos factores fundamentales para el posicionamiento de los productos en las góndolas de otros países.

Aparte de buscar una mayor calidad en los frutos, desde el área oficial se debe trabajar en la posibilidad de suprimir o reducir los impuestos vinculados a las exportaciones. Es el esfuerzo que se le está pidiendo en estos momentos al gobierno, ya que una medida en ese sentido redundará directamente en una mayor salida de productos al exterior. San Juan tiene para exportar en cantidad y calidad tomate, pimiento, melón, berenjena, ajo, cebolla, espárragos, mosto, pasas y vinos, entre otros productos como pistacho, damascos, higos, peras, membrillo, ciruelo y nogal. En total suman más de 30 especies las que se están cultivando en la provincia pero no todas ellas están condiciones de formar parte de la oferta exportadora ya sea por su volumen o por la calidad.

Desde el Estado provincial se han estado promoviendo algunas actividades para impulsar las exportaciones locales a través de algunos eventos como el “Iron Man” en donde se exhibieron numerosos productos ante una selecta concurrencia de profesionales y empresarios. Pero el accionar que se está reclamando debe ser mucho más enérgico y puntual para promover el desarrollo de la calidad desde el origen como base de mayores exportaciones.