Todo salió conforme a lo previsto en el gran espectáculo futbolístico entre Argentina y Brasil por las eliminatorias para el mundial de fútbol del próximo año que congregó en la provincia, el martes último, a aficionados y simpatizantes de distintos puntos del país y del exterior que se dieron cita conociendo que se trataba de un evento de primer nivel y único en sus características.
El armado del espectáculo fue casi perfecto, salvo algunas desprolijidades que se plantearon en la venta de entradas, propia de las cantidades que se manejaron y la demanda que se estableció, y en las dificultades que representaron la llegada a la provincia de más de 75 vuelos de aviones particulares que pusieron en evidencia la necesidad de contar a la brevedad con las obras terminadas de la remodelación del Aeropuerto Domingo Faustino Sarmiento, iniciadas hace cuatro años.
Se puede decir que todo lo demás fue una fiesta, impregnada del folclore propio del fútbol que se vivió desde el anuncio del partido, cuando se confirmó que San Juan sería sede de este histórico encuentro; el momento en que llegaron las delegaciones a sus respectivos hoteles -ni el fuerte viento de la tarde del lunes detuvo a los hinchas-; la salida de los planteles al Estadio del Bicentenario; el espectáculo que se montó en las inmediaciones del Parque de Mayo para la gente que no pudo acceder a la cancha y la inigualable experiencia de ver a Argentina-Brasil en un estadio colmado en el que no entró un alma más. Algo parecido a lo que ha ocurrido hace poco con otras experiencias similares en el autódromo del Villicum donde han venido distintas categorías a nivel nacional e internacional.
Hay que reconocer que estos megaespectáculos no son muy fáciles de organizar, ya que son muchos los detalles a tener en cuenta. De la misma manera el gran movimiento que generan en su entorno dejan a la provincia numerosos beneficios en materia de hotelería, comedores y restaurantes, confiterías y otros rubros que dependen directa o indirectamente de estos encuentros deportivos que hay que saber aprovechar para posicionar a la provincia y generar ingresos que también están vinculados con el turismo receptivo.
Para seguir organizando este tipo de convocatorias será necesario continuar optimizando la infraestructura de la provincia terminando de una vez obras como el aeropuerto, definiendo el tema de la terminal provincial de ómnibus y optimizando las vías de acceso a la provincia tanto del Este como del Sur.
