Se ha puesto en marcha la campaña "Puedo Decidir”, que se prolongará hasta el 28 del actual, destinada a prevenir el embarazo adolescente no deseado, ante el aumento de la maternidad no planificada que representa el 50% en la Argentina. La decisión de salir al cruce del problema es de la Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer (FEIM) con el apoyo de Unicef y una decena de entidades que buscan el esclarecimiento del tema sustentado en la ley 26.150 de Educación Sexual Integral, aprobada en 2006 y todavía sin cumplimiento efectivo en muchas escuelas del país.
Los datos que ha impulsado esta movilización institucional que es oportuna y reclamada, si se tiene en cuenta que diariamente se producen en el país 258 nacimientos de embarazos de niñas y adolescentes. Un 14% de los nacimientos totales son de madres entre 13 y 19 años y una de cada cuatro de estas chicas ya han tenido al menos un hijo, según las estadísticas.
Los mismos números oficiales afirman que 7 de cada 10 embarazos en adolescentes no son intencionales porque ocurrieron por accidente o por imposición, de manera que un 60% no quiso embarazarse y esa cantidad sube a 8 de cada 10 embarazos en niñas de menos de 15 años, y la mayoría como consecuencia de situaciones de abuso sexual y violación. Estas cifras empeoran en términos de brechas y desigualdades en provincias como Chaco, Formosa y Misiones, donde uno de cuatro nacimientos son de madres adolescentes.
El mensaje de las ONG será comprensible para los jóvenes porque se compone de un sitio web, memes, juegos on-line, folletería, afiches, stickers y banner, pero también se cumplirán actividades presenciales, se realizarán talleres, y acciones de difusión en la vía pública, medios, foros y muestras, entre otros canales comunicativos. "Puedo Decidir” apunta a derribar mitos acerca de la sexualidad, eliminar estereotipos de género y empoderar a esta población, de acuerdo a la estrategia trazada.
Esta difusión masiva y enmarcada en la profesionalidad de los organizadores, puede cubrir la ausencia de una educación sexual integral en las escuelas para que los adolescentes estén alertas frente al abuso y la violencia sexual. También será un llamado de atención por las dificultades que puedan tener para el acceso a los servicios de salud y/o la interrupción legal del embarazo no deseado.
América latina es la segunda región del mundo con mayor tasa de embarazo no planificado en la adolescencia, atribuible a factores sociales, económicos y culturales, pero también por falta de información.