San Juan se caracteriza por contar con una fauna autóctona diversa y de singular belleza, que hay que conservar y proteger como una manera de preservar el patrimonio faunístico que está en estrecha vinculación con el medio circundante y las condiciones ambientales de la región. La depredación de las aves que se viene practicando casi en forma sistemática mediante la caza con fines de su comercialización o a manera de exterminio por puro deporte, constituye un hábito que se debe controlar más estrictamente y sancionar en forma ejemplificadora para desalentarlo totalmente y asegurar la procreación y multiplicación de ejemplares. 

El ejemplo que acaba de ofrecer el personal del Parque Faunístico de Rivadavia, en conjunto con la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable del Gobierno de la provincia, con la liberación de 100 ejemplares de aves autóctonas y silvestres rescatadas del tráfico ilegal, demuestra cómo se debe proceder correctamente para preservar un recurso natural tan valioso. La liberación se realizó en el departamento Zonda con un operativo que incluyó la suelta de ejemplares de diucas, reinas moras y petiteros de collar, entre otros ejemplares autóctonos que después de haber sido rescatados de los traficantes fueron incorporadas a un proceso de rehabilitación para su recuperación y su posterior reincorporación a su hábitat natural, que de acuerdo a estudios realizados está emplazado en las inmediaciones de la zona en que fueron liberados. 

Es considerable el número de ejemplares que participaron de esta experiencia, aunque se estima que por año las aves cazadas por los traficantes triplican esa cantidad y que cada vez hay más personas que se dedican a la caza indiscriminada motivadas por las ganancias que les proporciona la comercialización de estos animales muy preciados y por lo que en ocasiones se pagan abultadas sumas de dinero. 

Ante esta realidad no queda otra cosa que intensificar por parte de los organismos pertinentes, especialmente la Secretraría de Ambiente y Desarrollo Sustentable en sus área dedicadas a la protección de la fauna y flora de la provincia, los operativos de control de cazadores furtivos para evitar una depredación que está ocasionando un serio daño a los ecosistemas en el ámbito provincial.

Tanto la flora como la fauna autóctona merecen el mayor de los cuidados ya que de ello depende que los oasis sanjuaninos no se sigan reduciendo en un permanente avance del desierto alentado en los últimos años por una sequía sin precedentes.