Israel, Francia, Rusia, República Dominicana y Alemania son algunos de los países que ya están suministrando a sus respectivas poblaciones una tercera dosis de refuerzo de la vacuna anti covid-19. Los resultados alcanzados con las dos primeras dosis han marcado el camino que a su criterio se debe seguir y que países como el nuestro deberían tener muy en cuenta a la hora de considerar la necesidad de acelerar el proceso de vacunación y comenzar a trabajar en aplicar una tercera dosis.
Los países que llevan la delantera en materia de inoculaciones, entre ellos Chile y Uruguay, entre los latinoamericanos, han determinado que con una vacunación rápida y efectiva se ha logrado reducir el número de muertes por covid-19 y que aplicar un refuerzo en estos momentos es el camino más apropiado para hacer frente a la temible variante delta que está haciendo estragos en distintas partes del mundo.
Con todos los inconvenientes que son de dominio público, nuestro país avanza muy lentamente a completar el cuadro de vacunación con la aplicación del segundo componente de la mayoría de las vacunas que se están utilizando. La inoculación de menores, como la que se ha iniciado en nuestra provincia con la vacuna Moderna y en otras jurisdicciones del país, representa un hecho muy alentador ya que se van completando todas las franjas etarias que estaban pendientes y que a medida que el virus ha ido avanzando se ha hecho necesario cubrirlas por los riesgos que implica no estar inmunizado.
Por otra parte, en estos últimos días se ha observado una aceleración en la vacunación con la habilitación en distintos puntos de la provincia de nuevos centros vacunatorios, campañas por barrios y villas y la habilitación de una mayor cantidad de "autovac" en los departamentos, además de los que ya estaban funcionando.
Con este ritmo de vacunación se espera que en poco tiempo más se alcance el 70% de la población que es el porcentaje establecido para la inmunidad de rebaño o inmunidad colectiva. Esto es lo que daría paso a una posible tercera dosis siempre y cuando se acuerde a nivel nacional la implementación de este refuerzo que en otras partes del mundo se está aplicando decididamente.
De continuar la pandemia un tiempo más y de ser necesarias futuras dosis de refuerzo, las autoridades de salud deberían estar atentas a las gestiones para que las vacunas sigan fluyendo y no se interrumpa bajo ninguna circunstancia su suministro, considerado desde hace tiempo como primordial para mantener la salud de la población.