Una abuelita en Japón tenía mucho frío y al revisar el cajón de su nieto encontró lo que pensó que eran medias térmicas. Sin embargo, se trataba de juguetes sexuales del joven utilizaba para masturbarse. 

El nieto entró a su habitación y encontró a la anciana recostada con algo rosa en sus pies. Al darse cuenta de que se trataba de sus "masturbadores", no pudo aguantar la risa y la filmó. Además, tuvo que ayudar a su abuela a sacarse las "medias" ya que están hechas de silicona. 

El joven se tomó el episodio con gracia, pero decidió que ya no podrá usar más sus juguetes ya que estuvieron en los pies de su abuelita. 

En lugar de tirarlos, decidió publicar su historia en Twitter y ofreció regalarlos a quien los necesitara.