Las restricciones sociales impuestas por la pandemia de coronavirus lentamente se van flexibilizando, pero aún hay que tomar muchas precauciones. Especialmente los grupos de riesgo, como los adultos mayores.

Los abuelos se ven forzados a mantener distancia de su propia familia, que ya puede salir un poco más, pero podrían ser portadores asintomáticos y transmitirles la enfermedad. Por eso deben evitar el contacto directo con cualquier persona que haga salidas fuera de su casa.

Muchos nietos extrañan a sus abuelitos: la relación entre ellos suele ser muy estrecha, y cariñosa. Por eso esta nene, ade 10 años, que quería abrazar a sus abuelos como lo hacía antes del coronavirus, tuvo una brillante idea.

Paige vive en Riverside (California),y no se resignaba a estar lejos de sus abuelos. Con la ayuda de su madre, Lindsay, que es enfermera, pensaron una manera de lograr un contacto físico personal sin arriesgar a los mayores al contagio.