Dos nenes rompieron en un museo la escultura de cristal más grande del mundo, valuada en en 64.000 dólares.

Se trata de un castillo, que tardó unas 500 horas en construirse y pocos segundos en ser destrozado.

La escultura fue creada por el vidriero español Miguel Arribas y representaba el Castillo de la Cenicienta del parque Walt Disney en Orlando.

Se encontraban en el Museo del Vidrio en Shanghái (China) hasta que el pasado mayo cuando los dos nenes la rompieron.

Los menores cruzaron una cinta de seguridad y tropezaron con la vitrina que protegía la obra.

Según medios locales, una torre del castillo se rompió por completo, mientras que otras partes resultaron dañadas.

Los padres de los niños involucrados se disculparon y ofrecieron pagar los gastos.

En tanto, el museo se contactó con el autor del castillo para averiguar si puede reparar la escultura.