El cielo de Roma sorprendió a todos los peatones y conductores al parecerse a una espeluznante escena de una película de terror. La imagen del momento fue compartida en la red social Reedit.

Millones de pequeños estorninos cubrieron el cielo, al regresar en gran número a la capital italiana buscando calor y refugio de la helada Europa oriental y Escandinavia, informa el portal Inverse Science.

Hasta cuatro millones de aves llegan a Roma cada año atraídas por el calor de la ciudad en relación a las regiones vecinas.