Varias organizaciones animalistas alrededor del mundo, se han visto preocupadas -e indignadas- al descubrir unas fotos de los tigres del Parque del Tigre Siberiano en la ciudad de Harbin (China). Claramente, los felinos han sido sobrealimentados por sus cuidadores y ahora están obesos. Aunque muchos de los visitantes lo encuentran “gracioso” y hasta “lindo”, la realidad es que esto no habla nada bien de su dieta ni de las condiciones en las que se encuentran.

El parque afirma que no hay nada de qué preocuparse, porque según ellos es común que los tigres aumenten de peso durante los meses de invierno, y bajen de nuevo durante la primavera.

Cuando están en buena forma, los tigres de Siberia son extremadamente rápidos y ágiles para cazar, pero estos pobres felinos no pueden más que permanecer en el suelo.

Según un artículo de Jarryd Salemn en News.com.au, los visitantes del parque pagan para poder alimentar a los tigres con tiras de carne de vaca, que dejan a penas a su alcance. También dice Salemn que en el parque venden pollitos vivos para que los turistas los empujen a través de una ventilación hasta llegar a los felinos.