Un episodio vergonzoso ocurrió este martes durante el amistoso que Brasil le ganó 5 a 1 a Túnez en París. El futbolista del Tottenham, Richarlison fue a festejar un gol hacia un banderín del córner y mientras se abrazaba con sus compañeros le tiraron una banana.

Esto sucedió pese a que el jugador del equipo de Tite no había tenido ni un gesto provocativo.

El periodista Guilherme Pereira, que estaba cerca del lugar, informó que el autor del acto de racismo fue identificado inmediatamente. El primer objeto que le tiraron a Richarlison fue pateado por un compañero hacia afuera de la cancha, y luego cayó la banana.

Esto sucedió en un contexto de lucha contra la discriminación: Brasil salió a jugar sin las cinco estrellas en su camiseta, por los títulos del mundo que acumula, con el argumento de que sin sus futbolistas de raza negra jamás hubiese ganado un título. Por eso, la Confederación Brasileña de Futbol repudió de inmediato la agresión al futbolista.

“Lamentablemente, tras la acción, se tiró un plátano al césped hacia Richarlison, autor del segundo gol brasileño. CBF refuerza su posición para combatir el racismo y repudia cualquier manifestación prejuiciosa”, escribió la entidad.