Samir Rignall, un británico de 46 años, arregló una cita con una supuesta niña de 14 años en la ciudad de Hereford, Reino Unido. Sin embargo, a su llegada a la estación de tren fue recibido por David Poole, un hombre del grupo de "cazadores de pedófilos" conocido como H. Division.

El hombre enfrentó duramente a Rignall, lo increpó por su comportamiento y calificó de "asqueroso" el hecho de que un padre de familia actúe de esa forma. Rignall intentó huir del lugar, pero el equipo de Poole llamó a la Policía, que detuvo al sospechoso y encontró varios juguetes sexuales en su bolso.

Durante 4 semanas, Poole se hizo pasar por una joven de 14 años y mantuvo contacto a través de Internet con Rignall, quien le había contado que pertenecía a un grupo de prácticas sexuales y fantasías eróticas conocido como BDSM, clasificado dentro del género del sadismo criminal.

En los mensajes que fueron presentados como evidencia a las autoridades, se observa que "la joven" preguntó varias veces a Rignall si su edad no era un problema. "Mientras me aceptes a mí yo te aceptaré a ti", respondía el hombre, quien finalmente admitió que pretendía encontrarse con la adolescente para mantener relaciones sexuales.