Un hombre voló en parapente sentado en el sillón de su living
Un sorprendente video muestra a un hombre haciendo un vuelo en parapente mientras está sentado en su sillón.
Un sorprendente video muestra a un hombre haciendo un vuelo en parapente mientras está sentado en su sillón.
Hacer un vuelo en parapente puede ser una experiencia muy divertida y liberadora. Sin embargo, hay que tener en cuenta ciertos riesgos y tomar precauciones para evitar cualquier accidente.
Sin embargo, un hombre en Turquía decidió desafiar estas normas de seguridad y hacer algo totalmente inusual que le puso los pelos de punta a todos los espectadores. El protagonista realizó el vuelo sentado en su sillón. Todo quedó registrado en un impresionante video.
Hasan Kaval, un joven turco, se dirigió a realizar un vuelo en parapente en Oludenjz, una de las zonas costeras del país que atrae un gran nivel de turismo. La grabación muestra como Hasan está sentado en un sillón desde la zona que despegan los parapentes, esperando por su turno. Sin embargo, luego del primer minuto de video, la sorpresa es total cuando se ve que el turco comienza su viaje sin levantarse de ahí.
Los trabajadores del lugar ataron el parapente al sillón de Hasan y lo hicieron levantar vuelo. Además, mediante una plataforma, lograron enganchar una televisión que lo acompañó durante todo el viaje. Las imágenes del hombre en el aire son realmente impresionantes.
Durante el viaje, Hasan no mostró en ningún momento de preocupación. Incluso, al comienzo del vuelo se lo ve cambiarse las zapatillas y ponerse unas pantuflas. Además, llevó frituras y una gaseosa en una mochila y las consumió sin problema.
Probablemente una de las cosas más impactantes es que el hombre no se ató para realizar el vuelo. Afortunadamente, el turco no tuvo ningún problema y logró aterrizar sano y salvo en tierra con este espectacular video.
Tenían 40 y 31 años, trabajaban juntos en un horno de ladrillos y eran padres de familia. Fallecieron en el lugar.
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El accidente se produjo en Maipú.
Sus seres queridos volvieron a homenajearlo para que su recuerdo siga vivo.
Su precio cayó hasta los US$ 44.500.
Lo resolvió el magistrado James Donato, que de ese modo puso fin a un proceso iniciado en 2015.